A pedido del propio senador reelecto por el departamento San Lorenzo, Armando Traferri, el Senado de Santa Fe aprobó este jueves su desafuero parcial, pero ahora el legislador quiere el apartamiento de los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra, que investigan el circuito de juego ilegal de la provincia en el que lo involucran.
Traferri, que está por estos días en Ibiza, España, con su hija, presentó en la mañana de este viernes a través de su abogado Oscar Romera un escrito en el que le solicita a la fiscal regional de Rosario, María Eugenia Iribarren, el desvinculamiento de Edery y Schiappa Pietra de la causa que lo compromete.
En la nota, donde recalca que ahora sí se pone a disposición de la Justicia, el senador apunta a «información recabada» por otros fiscales provinciales respecto de supuestos «perfilamientos y escuchas ilegales» que lo incluyen y se habrían realizado durante la gestión del criminólogo Marcelo Saín como ministro de Seguridad provincial.
“Hace casi tres años que sufro una persecución política-judicial en el marco de lo que fue y es uno de los sucesos más vergonzantes de nuestra historia provincial”, había dicho Traferri el 21 de septiembre último en su ofrecimiento de cesar con los fueros que lo protegen como legislador. Fue un día después de que los fiscales Pablo Socca y Miguel Moreno, a cargo de la investigación por extorsiones atribuidas al jefe narco Ariel “Guille” Cantero, denunciaran a su par Edery por la “presumible comisión” de delitos de acción pública.
El senador, en esa ocasión, se victimizó: “Este verdadero grupo de tareas me tenía entre sus objetivos. Pero también a otros dirigentes. Incluso el hoy gobernador electo de la provincia, Maximiliano Pullaro, era uno de los blancos de esta asociación, según se desprende de las pruebas”, dijo al respecto.
Romera, el abogado del legislador, explicó que en la nota piden que la decisión de la Justicia sobre el apartamiento de los dos fiscales se lleve adelante en una audiencia pública, abierta a la prensa y al público en general. «Queremos que esta decisión no se tome a puertas cerradas, sino que sea transparente y todos puedan comprender por qué se toma tal determinación», reforzó el letrado.
«Siempre hemos sostenido que se trata de un montaje político, y el tiempo ha demostrado que estábamos en lo cierto. Desde un principio, Traferri afirmó que se presentaría si los fiscales a cargo no eran Edery y Schiappa Pietra», siguió Romera sobre la investigación del juego ilegal y quienes la impulsaron.
La comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara alta primero, y su par de Juicio Político después, dieron visto bueno al retiro de los fueros de Traferri, pero sólo a los efectos de someterse al proceso penal en la causa por el juego ilegal. La resolución le mantiene «el resto de las inmunidades», como la que impide su arresto. Y explicita que debe seguir ejerciendo el cargo para el que fue reelegido.
La novedad se da en el marco de la causa por presunta corrupción vinculada con el juego clandestino, lo que se destapó a partir del crimen de un apostador en el casino City Center y determinó incluso el encarcelamiento y la eyección del entonces fiscal regional Patricio Serjal y el también fiscal Gustavo Ponce Asahad.
Semanas atrás, el propio legislador justicialista había puesto su desafuero a consideración del cuerpo, luego de conocerse la denuncia penal por presunta connivencia con una integrante de la banda de Los Monos, Mariana Ortigala, contra el fiscal Matías Edery, quien junto con su par Luis Schiappa Pietra pidieron sin éxito en el pasado que la Cámara alta provincial le quitara los fueros al senador sanlorencino.
A partir de ahora, la decisión de la Cámara de senadores deberá comunicarse al Poder Judicial y se tramitará la presentación del legislador ante estrados judiciales, mientras la Legislatura analiza por su parte si sanciona o no al fiscal Edery, denunciado por sus propios pares Pablo Socca y Miguel Moreno en una causa por extorsión que involucra al célebre Ariel “Guille” Cantero pero también a la mencionada Ortigala, cuyo testimonio fue vital para la condena del capo narco Esteban Alvarado, y Lorena Córdoba, viuda del zar del juego clandestino de Rafaela David Perona.