Los bioquímicos comenzarán a cobrar un “copago” o “bono”, a los afiliados a las prepagas que sería del orden de los $ 3000 a modo de compensación por los costos de sus prestaciones.
La titular de la Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina (CUBRA), María Cecilia López, justificó la medida por los desfasajes que se acumularon en los últimos años.
“La situación viene de arrastre porque durante de todo el año nunca se trasladaron incrementos acordes al proceso inflacionario y en este último tiempo, con la escalada descontrolada de precios fijados por los proveedores de insumos y reactivos, debido a los problemas de importación, ha provocado que esa brecha de incrementos que nos separa sea insostenible”, explicó en un comunicado.
La titular de la Cubra recordó que los bioquímicos no cortaron los servicios en octubre a las obras sociales y prepagas, como habían advertido, ya que “las entidades financiadoras abrieron mesas de negociación y de diálogo para solucionar la coyuntura” y reiteró que “el problema se mantiene con las prepagas que no nos pagan lo que nos corresponde”.
López aclaró que esta irregular situación afecta a bioquímicos de todo el país, aunque con matices según la región que se trate, lo que implica diferentes medidas para compensar la brecha existente entre la justa remuneración y los aranceles percibidos actualmente.
Hay coincidencia entre los bioquímicos de cobrar una cifra no inferior a los $3000.
“Ante este contexto extremo y dificultoso, y ante la indiferencia de quienes tienen a cargo el financiamiento de la salud, los bioquímicos estamos en riesgo de no lograr mantener el normal funcionamiento de nuestros servicios y la única opción o alternativa que nos queda es cobrar un bono compensador de emergencia, para continuar brindando la cobertura en los convenios en desequilibrio económico/financiero”, señalaron desde el sector.