Una entrevista radial perdida de la BBC a Banksy hace 20 años fue rescatada por la cadena de televisión británica y permitió conocer el nombre de pila del misterioso artista callejero. En 2003, el periodista Nigel Wrench le preguntó si se llamaba Robert Banks, a lo que él respondió: «Es Robbie».
Durante años, se había especulado sobre si el nombre del artista era Robin, Robert o Robbie, tal como señala la televisión pública. La entrevista completa puede escucharse en una colección de podcast de la BBC colgada online y llamada The Banksy Story. Tras el descubrimiento, el ente público grabó un episodio adicional.
En la entrevista, Banksy compara su forma de hacer arte, que consiste en hacer grafitis a toda velocidad, con cocinar en el microondas. «Es rápido. Quiero hacerlo y acabar», dijo el artista de Bristol.
¿Por qué no se descubrió antes la identidad de Bansky?
El dato del nombre salió a la luz ahora porque la entrevista al artista no se emitió entera en el momento, en julio de 2003, cuando Banksy tenía 20 años. Entonces, no se utilizó todo el material y se prescindió de ese pasaje.
Muchos años después, Wrench escuchó el podcast The Banksy Story‘ y decidió recuperar la entrevista completa de un minidisc que tenía en casa. Fue entonces cuando se percató de que el grafitero decía su nombre.
En la entrevista, Bansky también defendía el vandalismo como arte: «No me voy a disculpar por ello. Es una forma más rápida de expresar tus ideas, ¿no?».
«Mi madre solía cocinar asado todos los domingos y siempre decía: ‘Se tarda horas en hacerlo y minutos en comerlo’. Ahora come platos para uno calentados en el microondas y parece mucho más feliz. En realidad, estoy adoptando ese enfoque respecto al arte«, afirmaba.
Banksy saltó a la fama a través de una serie de grafitis que aparecieron en edificios de Bristol, Inglaterra, marcados por sus temas satíricos. A pesar de ser uno de los artistas más famosos del mundo, decidió mantenerse en las sombras.
En 2018, sorprendió al mundo del arte cuando su pintura Niña con globo se “autodestruyó” en Londres, inmediatamente después de haber sido vendida en una subasta por 25,38 millones de dólares, la cifra más alta que se haya pagado por una pieza suya.