Miguel Julio Rodríguez Villafañe*
El presidente electo de Argentina, Javier Milei, afirmó que privatizará la Televisión Pública, radio Nacional y la agencia nacional de noticias Télam. Llevar adelante dichos proyectos reviste una particular gravedad institucional, que afecta gravemente la debida tutela del derecho humano a la libertad de expresión y a la información y una importante claudicación estratégica.
En un momento en el que aparecen nuevos imperios desde lo informático-comunicacional y lo informativo, se vuelve fundamental, más que nunca, contar con soberanía en el manejo de las comunicaciones y la información. Debemos poder elaborar una agenda informativa propia, en la que las construcciones de sentido de los escenarios de la realidad se trabajen teniendo presente la perspectiva local, regional, nacional y de América Latina y el Caribe.
A su vez, hay que garantizar la democratización de la palabra para asegurar la dignidad a las personas y las sociedades desde la libertad de expresión y el acceso a la información. Todo lo cual se construye armando una agenda ciudadana plural justa, igualitaria, equitativa e integral en la construcción de sentido.
De esa manera evitar que se nos impongan, de manera unipolar, pensamientos o discursos únicos que buscan colonizar, más que informar y con un sentido hegemónico pernicioso para el bien común democrático, no permite compartir diversas perspectivas.
El Estado tiene el deber, insoslayable, de desarrollar una actitud proactiva y vigilante, controlando que se cumpla, concretamente, la garantía de pluralidad de la palabra y que los monopolios y oligopolios no operen de hecho, como se da, muchas veces en la realidad. La única manera de garantizar eficazmente esos derechos radica en la existencia de pluralidad de medios de diversos tipos.
En la situación que analizamos es de particular importancia que el Estado nacional cuente con una agencia de noticia como Télam, con la Televisión Pública y radio Nacional.
El mercado no puede regular la información
Resulta suicida para una nación libre, federal, democrática, republicana e independiente privatizar los medios públicos dejando en manos sólo del mercado la oferta informativa y el acceso a la libertad de expresión.
El mercado, en sí mismo, despolitiza la realidad porque trabaja la noticia como mercancía, lo que hace que no necesariamente se brinde la noticia que ayuda a conformar un sano pensamiento y juicio crítico en la sociedad, sino la que vende más o favorece a los que publicitan en el medio o a los intereses que el medio representa.
Los medios de difusión son factores claves en la legitimación del poder político, porque avanzan sobre la configuración de pautas de pensamiento y de vida de las personas, sobre la cultura, incluso sobre los criterios de entretenimiento. Contra eso, el destinatario común casi no tiene posibilidad de defenderse. Existe, por lo general, una debilidad estructural en la relación entre el usurario y quien le ofrece la información que consume.
Todo lo cual, evidentemente, genera un ámbito que limita el libre albedrío de las personas y de las sociedades para evaluar conscientemente sus reales posibilidades o necesidades al momento de tener que decidir sobre sus ideas, gustos o preferencias, si los medios que informan pertenecen a un solo sector que se privilegia constantemente. Bien sostiene la Ley 26522 de Servicios de Comunicación Audiovisual en su artículo 21: “Los servicios previstos por esta ley serán operados por tres tipos de prestadores: de gestión estatal, gestión privada con fines de lucro y gestión privada sin fines de lucro”.
Medios de gestión estatal
La Radio y Televisión Argentina (RTA S.E.) es una empresa estatal que tiene a su cargo la gestión de Televisión Pública, radio Nacional, Canal 12 TV Pública Regional y el servicio de Radiodifusión Argentina al Exterior. Fue creada por la Ley 26522 de Servicios de Comunicación Audiovisual, (art. 119). Dichos medios garantizan, de manera gratuita y federal, la expresión, información, comunicación y participación de todas las voces.
Emite valiosos canales premiados, como Encuentro, Paka Paka, DeporTV y la plataforma Contar. Ellos, entre otras distinciones, recibieron cinco premios en la edición 2022 de los premios de la Red TAL. Red que reconoce a las mejores producciones de las televisoras públicas de Latinoamérica. Además, Televisión Pública recibió el premio por Sic. Periodismo Textual en la categoría «Mejor programa periodístico».
La Radio y Televisión Argentina S.E. (RTA) en su vocación de servicio en excelencia, ha sido reconocida por la Organización de Estados Americanos (OEA), en la XI Edición del Premio Interamericano a la Innovación para la Gestión Pública Efectiva-2023, por el «Programa nacional de inclusión, buenas prácticas y ética comunicacional con enfoque de igualdad de género, diversidad y derechos humanos».
Dichos medios, que son un servicio público básico, están comprometidos con el conjunto de la sociedad, atentos a su diversidad y permiten la expresión de las minorías invisibilizadas en el escenario comunicacional, como, entre otros, es el caso de los pueblos indígenas.
También ellos cuentan con códigos de ética, que los responsabiliza ante la audiencia y los sitúa en el respeto a principios en su gestión. Códigos de compromiso éticos que no tienen gran parte de los medios de difusión del país.
Además, la señal de Televisión Pública se distribuye mediante 240 estaciones repetidoras analógicas, noventa estaciones digitales terrestres y se envía por el servicio de Televisión Digital, mediante el satélite Arsat1. De este modo, alcanza zonas rurales, de frontera, el territorio insular y la Antártida Argentina. La señal está además incluida en todas las redes de cable operadores.
A su vez, radio Nacional posee 49 emisoras distribuidas en todo el territorio, desde La Quiaca, en la frontera noroeste, hasta la Base Esperanza, en la Antártida. Este medio también es básico en la comunicación de grandes sectores de nuestro gran país profundo.
Agencia Télam
La agencia Télam de noticias es la agencia de noticias más importante de Latinoamérica y la segunda más importante de lengua castellana. Incluso, tiene portales en portugués y en inglés.
La agencia provee información periodística a unos 2800 abonados y permite difundir una información soberana de Argentina, distribuida a medios de prensa nacionales e internacionales y oficinas gubernamentales nacionales, provinciales y municipales.
En consecuencia, es inaceptable e inconstitucional, que se tire por la borda tanto esfuerzo humano y tecnológico al servicio del derecho humano de la información, la libertad de expresión, la formación ciudadana y la presencia soberana del país con personalidad propia.
*Abogado especialista en Derecho a la Información
Información como derecho y no como mercancía
Los trabajadores y trabajadoras de los medios públicos se organizan en asambleas para enfrentar los intentos privatizadores del presidente electo Javier Milei
El libertario Javier Milei brindó una entrevista radial al día siguiente del balotaje y aseguró que privatizaría los medios públicos, YPF y la Agencia Télam.
“La TV Pública se convirtió en un mecanismo de propaganda. No adhiero a esas prácticas de tener un ministerio de propaganda encubierto. Tiene que ser privatizado. Todo lo que pueda estar en las manos del sector privado va a estar en las manos del sector privado”, manifestó en sus primeras declaraciones radiales como presidente electo.
Ante esos dichos, lxs trabajadores de los medios públicos comenzaron a realizar asambleas en diferentes puntos del país desde esta semana. Las autoridades de los medios estatales difundieron un comunicado de rechazó a la privatización. Allí aseguran que la medida genera “rechazo y preocupación ya que demuestra un gran desconocimiento del rol que cumplen en la construcción democrática”. También destacan que los medios públicos garantizan “la información como un derecho y no como una mercancía, la cobertura en todo el territorio nacional, la pluralidad, diversidad e inclusión de sus contenidos, la producción de contenidos regida por el interés público y no por estándares comerciales, la generación de contenidos y agendas ausentes o de poca presencia en la lógica comercial”.
Judith Gerbaldo, periodista, consultora e investigadora en comunicación y trabajadora de Radio Nacional Córdoba, destacó la organización del sector y criticó la idea de privatización del nuevo gobierno.
“No se trata de pensar en este caso estrategias para el bien común sino que fundamentalmente se los está planteando como negocios para los amigos del poder que representan Milei y Macri”, expresó.
“Es tristísimo que se tomen medidas de esta naturaleza”, agregó la comunicadora, quien por último señaló que este tipo de medidas “atentan contra la pluralidad de voces, la multiplicidad de fuentes y la posibilidad de comunicarnos y de llegar a los lugares más aislados, tal como pasa con el trabajo enorme y potente de las radios comunitarias”.
“Estamos convocando a mostrarnos juntos en cada una de las asambleas de los medios públicos y a defender nuestro trabajo, buscaremos tener nuevas estrategias ante lo que pudiera ser una política del nuevo gobierno”, admitió Micaela Polak, periodista, delegada en Radio Nacional y Secretaria de Géneros del SiPreBA.
Luego de la amenaza anunciada por Milei, desde los medios públicos convocaron a distintas asambleas. “Es triste que no entiendan la función y el rol de los medios públicos”, concluyó Polak.
De todas maneras y a pesar de la alerta en la que se encuentran los trabajadores y trabajadoras, Polak apunta: “Sabemos que la vida política de este país no puede permitir la privatización de los canales públicos porque son fundamentales”.
En Rosario, fue vandalizada la placa de Radio Nacional que preside la puerta de entrada