La Costa Atlántica tiene una amplia variedad de alternativas para disfrutar de la playa y la naturaleza. Los pueblos y pequeñas localidades de la provincia de Buenos Aires, atraen a turistas todos los veranos, en especial a quienes prefieren sitios donde puedan descansar y alejarse de las grandes y ruidosas ciudades. Este destino tiene playas, uno de los faros más altos de Sudamérica, bosques, un arroyo y hasta cascadas.
Se ubica en el sur de la provincia de Buenos Aires, a poco más de 560 kilómetros del Obelisco. El recorrido es a través de la Ruta Provincial 29 y lleva alrededor de 7 horas de viaje. Se trata de Claromecó, un sitio que ofrece a los visitantes, además de una amplia oferta de servicios e infraestructura, una gran variedad de atractivos.
Claromecó es el centro principal de los 100 kilómetros de playa del Partido de Tres Arroyos, las más extensas del país. Una de las características que destacan a estas playas es la posibilidad de poder disfrutar tanto del amanecer en el mar como el atardecer, siendo muy pocos los sitios en Argentina que brindan esta espectáculo natural.
Las playas hacia el Este de Claromecó son totalmente desérticas durante 35 kilómetros y hasta la Villa Balnearia de Orense. Allí, los visitantes se encuentran con médanos gigantes, lagunas y zonas de piedras.
El agua tiene una mayor temperatura en esta playa con respecto a otros balnearios de la provincia dado el paso de la corriente cálida del Brasil frente a estas costas.
Uno de los atractivos más visitados es el Faro, que se ubica entre los más altos de Sudamérica. Este atractivo se puede conocer desde la atura y tener vistas panorámicas desde arriba. La Estación Forestal Ing. Paolucci es una de las más pintorescas para recorrer, allí convive una gran diversidad biológica.
También el Arroyo Claromecó que desemboca en las aguas del Atlántico y su paseo de las Siete Cascadas, un sitio ideal para recorrerlo y disfrutarlo conectándose con la naturaleza desde un punto especial. Este recorrido es perfecto para dejarse sorprender con los paisajes. El pintoresco camino que bordea el arroyo se puede hacer en automóvil o en bicicleta y permite detenerse en los diversos paradores para hacer fotografías, tomar mates y hacer avistaje de aves.
Mientras que los más aventureros, pueden surcar las aguas del arroyo Claromecó en Kayak o en bote, y vivir la adrenalina al pasar por las cascadas. El recorrido inicia en Puerto Mosquito, este viaje es perfecto para aquellos principiantes que necesiten soltarse y aprender a remar en kayak dejándose llevar por la corriente de un río.
Además, tanto desde la costa como embarcada, existe una muy buena pesca. Esto hace que en el lugar se desarrollen una gran cantidad de concursos de pesca deportiva; como es el caso de «Las 24 horas de la Corvina Negra», situado entre uno de los eventos más importantes que se realizan en la localidad y que cuenta con relevancia nacional e internacional.