España concedió en las últimas horas la nacionalidad a la escritora Gioconda Belli y a otros doce opositores nicaragüenses a los que el gobierno de Daniel Ortega despojó de su ciudadanía, según informó el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
«Hoy el Consejo de Ministros ha concedido la nacionalidad española a otros trece nicaragüenses despojados de la suya, incluyendo a Gioconda Belli, con quien he conversado telefónicamente», anunció Albares en la red social X.
Gioconda Belli: premio Reina Sofía con palabras sobre el feminismo y en contra de las dictaduras
«Los defensores de la democracia y la libertad cuentan con el apoyo de España», agregó el ministro del Gobierno del socialista Pedro Sánchez.
Belli, una de las escritoras centroamericanas más reconocidas, fue parte del grupo de más 300 opositores nicaragüenses a los que el Gobierno de Ortega quitó la nacionalidad en febrero de 2023.
Al conocerse la decisión de Managua, que también afectó al escritor Sergio Ramírez, exiliado al igual que Belli en España, el Gobierno español ofreció naturalizar a los opositores nicaragüenses despojados de su ciudadanía. Ramírez obtuvo la nacionalidad española en 2018.
Belli, quien no reaccionó a la decisión del Gobierno español, escribió el domingo en X: «El destierro como política de Estado es síntoma de la más ilegal y cruel intolerancia del régimen de Nicaragua».
«Ojos que no ven, corazón que no siente es el remedio de su arrogancia para ignorar cómo destruyen el espíritu democrático y los derechos ciudadanos», apuntó.
Gioconda Belli, autora de ocho novelas y varios poemarios, ganó este año el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, considerado el más prestigioso galardón de este género en español y portugués.
El anuncio oficial se había realizado en mayo pasado, reconociendo la «expresividad creativa, libertad y valentía poética» que caracteriza la obra de la autora de El país bajo mi piel o La mujer habitada, como recordó en el acto de entrega María Sonsoles Sánchez-Reyes, secretaria del jurado.
Belli (Managua, 1948), quien reside en Madrid, recibió en noviembre pasado el premio de manos de la Reina Sofía en un evento que destacó su contribución a la cultura iberoamericana y su firme postura en defensa de la libertad artística y la expresión poética.
La entrega del premio adquirió un matiz especial en el contexto de la situación política que enfrenta Belli, quien perdió su nacionalidad nicaragüense a mediados de febrero del año pasado por orden de Ortega.
En su discurso durante la entrega del premio, la escritora rememoró los días cruciales tras el derrocamiento de la dictadura somocista en Nicaragua en 1979, destacando la lucha y solidaridad que marcaron una etapa definitoria para su patria y destacó que «la solidaridad es la ternura de los pueblos», verso que escribió en esa época.
No obstante, la escritora tuvo palabras de profunda preocupación por la pérdida de libertades y la violencia en su país, al exponer sobre la situación política actual en Nicaragua, la persecución a opositores, periodistas y la intervención en instituciones como la iglesia católica, como el caso de los obispos Rolando Álvarez e Isidoro del Carmen Mora Ortega y otros religiosos que hoy están exiliados en Roma, luego de haber sido privados de su libertad en Nicaragua.
La escritora se refirió entonces a su exilio forzado por la represión del Gobierno de Ortega, cuando en mayo de 2021, tuvo que dejar atrás su hogar y pertenencias: «Mis palabras me cobraban un precio y escribí despatriada. No tengo dónde vivir, escogí las palabras. Allá quedan mis libros, mi casa, el jardín, sus colibríes, las palmeras enormes», recitó la poeta durante la entrega.
Instalada en España, Belli agradeció la solidaridad y apoyo de personas generosas, resaltando la importancia de sentirse parte de una comunidad en tierras extranjeras.