Cada vez falta menos para la vuelta del Clásico del Ascenso rosarino, que se jugará este sábado desde las 17 en el Gabino Sosa y que contará con la televisación de RTS Medios. Y quienes mejor para hablar de un partido tan importante que dos jugadores representantes de los clubes, esos que vivieron las mejores épocas de los equipos representativos de la ciudad en los torneos de AFA.
Con el verde césped del campo de juego como testigo y una pelota de por medio, El Ciudadano se reunió con dos glorias de Central Córdoba y Argentino: Jorge Forgués y Andrés Aibes. Ambos saben lo que significan estos partidos para los hinchas y lo que es representar la camiseta de los clubes ante tremendo desafío.
La primer consulta para los dos fue, obviamente, cómo están viviendo estas horas previas al duelo del sábado.
“Con ansiedad porque tengo mis hijos que salieron hinchas del Charrúa, lo siguen, vienen todos los sábados, mi nieto juega acá y aparte porque uno se ha criado acá en el club y siempre quiere que Central Córdoba triunfe”, contestó el Forgués, futbolista que tuvo tres etapas como jugador donde ganó un título en la temporada de 1987/1988 de la Primera C y que fuera entrenador matador en cuatro ocasiones, agregó: “El sábado va a ver un marco impresionante y eso tiene que darle un incentivo a los jugadores para que nos quedemos con el triunfo”.
Por su parte, Aibes, quien estuvo en barrio Sarmiento desde 1992 hasta 2000, consiguiendo el bicampeonato en la temporada 1998/99 de la Primera B, ganando el Torneo Apertura y el Clausura, obteniendo el ascenso a la Primera B Nacional y quien tiene una tribuna con su nombre en el estadio José Martín Olaeta, se mostró feliz y expectante para poder disfrutar del espectáculo. “La verdad que estoy muy contento porque vuelve el Clásico a la ciudad. Uno lo ha disfrutado como jugador y ahora toca como hincha, estoy ansioso para que llegue el sábado y ver el partido”, contó.
Siempre se dice que los Clásicos son partidos “aparte” que no importan cómo llegan los equipos porque se juega algo más que tres puntos.
Sobre este tema, el exdefensor salaíto explicó: “Esto es un partido aparte, vos te preparas distinto; puede venir uno mal y el otro bien, pero se olvida en esta ocasión. Ojalá salga todo lindo y que la gente pueda disfrutarlo”.
Por su parte, el exdelantero charrúa opinó que “seguro son especiales, vienen los dos parejos, todavía no encontraron su fútbol”, y puntualizó sobre el elenco de barrio Tablada. “Central Córdoba tiene un buen primer tiempo ante Atlas como local, donde no mereció perder, y jugadores interesantes para esta categoría. Creo que con el correr de los partidos, mientras más se vayan conociendo, el equipo va a rendir mucho”, dijo.
“Yo creo que tiene que motivarlo al jugador, eso es fundamental. Jugar a cancha llena te da una motivación extra. Se va a ver un partido intenso, de mucho nerviosismo y el que tenga la capacidad de sortear toda esa presión que va a haber por mucho público, va a ser el que gane”, afirmó Forgués ante la consulta de que si para los jugadores puede cambiar algo que se juegue con las dos hinchadas.
Respecto al tema, Aibes sostuvo que “la semana previa es muy lindo, preparar el partido, el entorno y este tiene un sabor especial porque va a ser con ambas hinchadas. Eso te hace bien y podés disfrutar con tu gente y con la del rival”.
Sus recuerdos Clásicos
El Ciudadano le pidió a ambos protagonistas que marcaran cuál había sido el duelo que más recordaban de esta clase de enfrentamientos.
“El que ganamos en cancha de Argentino. Era el primer Clásico de local, jugar con las dos hinchadas fue hermoso, ver las dos tribunas de bote a bote no tiene precio. Y ni que hablar del disfrute post partido”, eligió el Chaqueño, con suerte dispar en dos cotejos jugados, de un triunfo albo en casa.
El Bocha, en tanto, trae de su recuerdo que “viví tres Clásicos. Uno en cancha de Argentino, otro en Newell’s y uno en el Gabino Sosa”, pero escoge el jugado en barrio Tablada. “Obviamente me quedo con el tercero en nuestra cancha donde ganamos 3-0 e hice un gol”, señala quien fuera campeón con la casaca charrúa y tiene récord de dos ganados y uno perdido en duelo entre azules y albos.
Dos ídolos de los clubes como jugadores que ahora viven este Clásico como hinchas y esperan que el sábado por la tarde, sea cual sea el resultado, termine siendo una fiesta del fútbol de la ciudad y que demuestre que estos partidos tan importantes como son un Central Córdoba ante Argentino pueden jugarse con las dos hinchadas en las tribunas.