El cantante y compositor René Pérez, conocido por su apodo Residente con el que formó parte de la recordada Calle 13, ultima los detalles del guión de lo que será su primera película, que estaría listo para el verano. De este modo, el músico que en septiembre regresará a la Argentina, debutará en el mundo del cine con una historia que tendrá como punto de partida 1898, cuando Puerto Rico pasó de provincia de España a territorio de Estados Unidos, al final de la guerra Hispanoamericana.
René participó en los últimos días un evento en la Universidad de Nueva York en el que habló sobre sus proyectos futuros, pero sobre todo se explayó en el tema de la Guerra de Gaza, en el que dejó claro su apoyo a los palestinos, y en las protestas universitarias en Estados Unidos.
El músico se encuentra ahora inmerso en sus propios proyectos donde aparece el guión de su primera película en el que ha trabajado durante cuatro años junto al guionista Alexander Dinelaris, ganador del Oscar por Birdman.
“Lo que me motiva ahora es terminar el guion, escribir la película que estoy haciendo”, recalcó el artista según publicó la agencia de noticias EFE, que se encuentra en un momento de su carrera cada vez más disconforme con la industria de la música, al punto de haber pensado en dejarla.
De gira latinoamericana
Pérez se encuentra en medio de la gira Las letras no importan con la que promueve su más reciente disco, homónimo, que salió al mercado el pasado febrero, con varios invitados, al que se refiere como una transición en su carrera.
Pese al título del disco, a Residente las letras de sus canciones sí le importan, y mucho. De hecho, las ha utilizado de forma muy consciente en sus temas para denunciar la corrupción en el gobierno de su país o las injusticias sociales, o para reivindicar la identidad latinoamericana.
“El título es un juego con lo que está ocurriendo con la Inteligencia Artificial (IA), es un poco como me siento yo con cosas que no son tan importantes como antes sentía que eran. Es todo lo contrario, para mí sí importan las letras y estoy siendo irónico con eso”, señaló.
Y sobre su cambio en el rumbo artístico, detalló: “Me siento más incómodo, estoy haciendo cosas que me mantengan en esa incomodidad constante para hacer cosas nuevas porque cuando uno se siente cómodo es cuando uno hace lo mismo todo el tiempo. Estoy en esa búsqueda de la incomodidad”.
En el mismo sentido, el músico se solidarizó con las protestas universitarias por la guerra en Gaza. “Lo que estoy viendo que está ocurriendo en las universidades es bien especial y hace falta. Hay que dar el mensaje, hacer presión para que cambien las cosas, que la gente analice lo que está pasando”, indicó el artista que se mostró sorprendido de que estas protestas no ocurrieran antes, desde el mismo octubre, cuando comenzó la guerra de Israel-Hamás en la Franja de Gaza.
“Está pasando lo que tenía que pasar desde octubre, pero ahora me encanta que esté pasando y ojalá provoque presión en el gobierno de Estados Unidos para que dejen de auspiciar el genocidio”, argumentó el artista.
