Mañana, a las 9, el Banco de la Nación Argentina entregará a la Universidad Nacional de Rosario (UNR) las llaves del edificio conocido como “La Catedral”, ubicado en calle San Martín 754 y en el que funcionará un Centro Cultural gestionado por la casa de estudios. La cesión del inmueble, sobre el que años atrás el Ejecutivo rosarino pretendía instalar el Museo de Arte Oriental, es parte del convenio por el cual la UNR transfirió las cuentas sueldo que le manejaba el Banco Municipal al ente financiero nacional.
El edificio en cuestión resalta por su alto valor patrimonial. Desde el punto de vista arquitectónico, está encuadrado en el período denominado Eclecticismo-Academicismo. Fue proyectado por la Oficina Técnica del Banco Nación en 1921, y su construcción la dirigieron los hermanos constructores Tito y José Micheletti entre 1926 y 1929.
Su arquitectura imponente y el sorprendente revestimiento interior, resuelto íntegramente en granito traído de Italia en la década de 1920, se complementa con altas columnas y un formato característico de su planta que se asemeja a la de una catedral, lo que dio origen a su denominación.
Cuenta además entre sus singularidades con un raro escritorio circular trabajado en madera preciosa, cajeros construidos y trabajados en bronce bruñido, una enorme puerta de bronce macizo, mármoles en sus paredes de acceso y un delicado tallado del jaspe que enmarca la puerta y las ventanas de cristal azulado con bisel. Junto con el remate del edificio, completan una de las muestras de la arquitectura de principios del siglo pasado que aún se conservan en excelente estado
El edificio estará destinado a un Centro Cultural cuya finalidad será la difusión, concreción de actividades de producción de las diferentes expresiones del arte y la cultura de la Universidad, de la ciudad y de la región.
Del acto de traspaso participarán el rector de la UNR, Darío Maiorana, el vicerrector Eduardo Seminara y la secretaria de Cultura, Marta Varela. Por el Banco Nación lo harán Silvia Gallego, directora de la entidad, y el gerente zonal de Rosario, Roberto Sanguinetti, entre otras autoridades.
La Municipalidad de Rosario había hecho gestiones para que la construcción conocida como La Catedral albergara el llamado Museo de Arte Oriental, pensado como “un espacio de diálogo intercultural destinado a impulsar y dar a conocer las producciones plásticas, musicales, fílmicas, teatrales y literarias de la cultura oriental” con “una mirada contemporánea e integradora sobre los pueblos del continente asiático”. Pero pese a las negociaciones entabladas en su momento con el Banco Nación y la Secretaría de Cultura de la Nación –cuando la dirigía Torcuato Di Tella, quien pretendía mudar el museo de Buenos Aires a Rosario–, la que se quedó con la emblemática casona fue la Universidad. Y ello como parte del “paquete” de negociaciones que llevaron a la UNR a mudar su agente financiero, y transferir sus ocho mil cuentas personales y un presupuesto de casi 500 millones de pesos anuales al Banco Nación.