Después de tres fugas de presos en solo dos meses, el jefe de la Policía de Rosario, Daniel Acosta, decidió desplazar a la jefa de la comisaría 5ª, Gabriela Alesso. En su lugar, fue designado el comisario Hernán Cabral, proveniente de Granadero Baigorria.
El escape más reciente ocurrió este viernes, cuando Jonathan Barreto, a quien imputaban como integrante del Clan Tripi, logró escapar mientras participaba en una audiencia imputativa por medios electrónicos. El detenido pidió permiso para ir al baño y aprovechó un supuesto descuido para evadirse, a pesar de estar bajo fuerte custodia policial como presunto integrante de una de las bandas narcocriminales que operan en Rosario.
No fue un episodio aislado. Suman tres las fugas recientes de la dependencia de Italia al 2100 en un corto lapso de tiempo. Hace sólo unos días cinco presos lograron escapar tras reducir a su custodia.
Según reconstruyó la fiscal Andrea Vega, los evadidos –todos fueron recapturados posteriormente– le pidieron a uno de los guardias de la dependencia que abriera la puerta del penal transitorio con el objetivo de pasar del módulo de detención Nº 2 al módulo de detención Nº 1, un DVD.
En ese momento, los presos se abalanzaron sobre el efectivo con un arma improvisada con el palo de un escobillón, y lo golpearon. Después corrieron hacia el fondo de la comisaría para subir las escaleras traseras y escaparse a través de terrazas linderas.
En mayo pasado, en tanto, otros 12 presos cortaron barrotes y accedieron a la terraza para emprender la fuga. Uno de los fugados regresó con su madre y se entregó. En el recuento confirmaron el escape, y trascendió que en el lugar tiene capacidad para una veintena de detenidos, pero hay más de cuarenta.
Con todo, el comisario Hernán Cabral, quien asume la jefatura tras haber desempeñado funciones en la comisaría 9 de Villa Gobernador Gálvez, en la comisaría 24 de Granadero Baigorria y en la gestión de seguridad para espectáculos deportivos.