Muchos simpatizantes de Rosario Central solicitaban que los directivos del club salieran a hablar sobre el tema Di María. Y fue el propio presidente del club, Gonzalo Belloso, quien tomó la palabra y le puso punto final a lo que fue una de las grandes novelas del actual mercado de pases.
“El sábado a la tarde nos comunicamos con él y me dijo que no volver ahora porque no sienten que haya garantías de seguridad para él y su familia”, sentenció en el programa Radiopólis que se emite por Radio 2. Y rápidamente agregó: “Él nos dijo que iba a tomar una decisión finalizando la Copa América y nos duele porque lo queríamos, pero no abro juicio de valor sobre sus motivos ya que es algo muy personal”.
«Nunca pidió jugar por cuatro meses ni dos años, en este último tiempo pensó volver, pero no se convencieron de eso. Nosotros pudimos contarle nuestras propias experiencias, que con Carolina nosotros vivíamos en Uruguay cuando asumimos la presidencia del club, tuvimos amenazas de todo tipo, verbales, críticas en mi casa, en lo de mi suegro, en lo de mi mamá. No quiere decir que todo el mundo tiene que hacer como yo, pero las amenazas después se convirtieron en apoyo y he sentido, a partir de que nosotros tomamos la presidencia del club, un apoyo incondicional de los hinchas, de la ciudad, de las autoridades de la ciudad».
Más tarde el directivo confió que “la vuelta de Di María era un sueño para todos nosotros, incluso para mí comenzó mucho antes de ser presidente de Central”. Y luego explicó: “A lo largo de este último año creció mucho la posibilidad de que él venía. Creemos que estamos en un muy buen momento para recibirlo. Tenemos un plantel afianzado, con un técnico de la casa y con una estructura sólida”.
Al ser consultado sobre si podía contar la propuesta contractual que le hicieron, el presidente respondió: “Son cuestiones privadas. Sí puedo decir que era una propuesta muy seria, la cual podíamos cumplir”. Y para finalizar añadió: “Tenemos 135 años, no termina en Ángel, no termina en Miguel, no termina en nadie, Central seguirá siendo cada día más grande”.
Sobre Di María y su seguridad ya se había expresado el goberenador Maximiliano Pullaro. En ese marco, el mandatario afirmó al móvil de Cadena 3 Rosario que «cuando una persona es una figura pública, indudablemente, uno pierde muchas libertades. Uno no puede vivir como una persona común«. Pullaro remarcó que es difícil frenar amenazas provenientes de organizaciones criminales o grupos de hinchas, pero si se cumple el protocolo de seguridad no hay riesgo. Y advirtió que para ello «hay que perder libertades».
