Debido a las pérdidas causadas por las dificultades climáticas iniciadas con las fuertes lluvias en la primera mitad del año y la helada de las últimas semanas, los agricultores del Gran Rosario están atravesando una crisis económica irremontable que afecta directamente los precios de las verduras en la provincia.
Esta realidad sumada al complejo contexto económico del país genera que los productores de hortalizas no puedan cubrir los gastos que conlleva volver a sembrar de forma sistemática, teniendo en cuenta que el valor de los insumos que utilizan para trabajar está fijado en dólares. Las pérdidas y la falta de producción impactan automáticamente en el precio final que se ve en las verdulerías, pero de ese monto es muy poco lo que les queda a quienes producen en el campo.
Ante estos hechos Juan Tejerina, productor radicado en Pueblo Esther y referente del MTE afirma: «Desde el mes de marzo le venimos pidiendo al Ministerio de Desarrollo Productivo de Santa Fe y a sus funcionarios que den una respuesta, más que nada el poder organizar una reunión para tratar la problemática, pero hasta ahora desde el gobierno provincial no se decidieron a atendernos, para nosotros cada día la cosa se va poniendo peor, nos preocupa no saber cómo sostener el trabajo hasta fin de año».