El oro antes del oro. El golpe antes del golpe. La noción de que el mundo había cambiado para siempre. Argentina fue el autor del cachetazo histórico para los NBA en el Mundial de Indianápolis, pero en los Juegos Olímpicos el orgullo norteamericano de ganar medallas de oro consecutivas seguía intacto y una constelación de estrellas estaban ante el joven equipo de Rubén Magnano, que venía haciendo historia, rompiendo esquemas, desafiando gloria y destino. Y lo hicieron otra vez.
Fue el 27 de agosto de 2004. En Atenas. Y allí la Generación comenzaría a ser Dorada. Esa tarde venció 89-81 a Estados Unidos en las semifinales de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004. La victoria más resonante de todos los tiempos para el básquet argentino
Contexto: sólo dos países que ya no existen pudieron ganar el oro alguna vez, además de Argentina y USA. Fueron la Unión Soviética en 1972 y 1988 y Yugoslavia en Moscú 1980, una edición de la que Estados Unidos no participó a raíz de un boicot político en plena Guerra Fría. Hasta Atenas 2004, los norteamericanos habían ganado 12 de las 14 ediciones a las que se habían presentado; y, desde entonces, fueron campeones en 2008, 2012, 2016, 2020 y 2024…
Plantel: Carlos Delfino, Luis Scola, Gabriel Fernández, Leonardo Gutiérrez, Walter Herrmann, Alejandro Montecchia, Andrés Nocioni, Fabricio Oberto, Juan Ignacio Sánchez, Hugo Sconochini y Rubén Wolkowyski, Emanuel Ginóbili
Previa: Argentina venía de ganarle a Grecia en cuartos de final y de ser tercero en la fase de grupos tras derrotar a Serbia, China y Nueva Zelanda pero perder con España e Italia.
El partido
El 27 de agosto de 2004, ambas selecciones se enfrentaron con el objetivo de garantizarse una medalla. LeBron James, Allen Iverson, Carmelo Anthony, Tim Duncan, Dwayne Wade. Del otro, uno que solo había participado 3 veces (1948, 1952 y 1996) y que había salido 4º en su mejor torneo (Helsinki 1952). Pero Manu Ginóbili lideró con 29 puntos a una Argentina que dominó desde el segundo cuarto, más allá de algunos sustos en el tercero. Duncan, MVP de la NBA en 2002 y 2003, era claramente la mayor amenaza de los norteamericanos.
El primer cuarto fue parejo: Emanuel Ginóbili se destacó en Argentina con 10 puntos y Tim Duncan, su compañero en San Antonio Spurs, en Estados Unidos con 8 puntos. En el segundo cuarto Argentina aprovechó la salida de Duncan por cargarse dos faltas, para llegar al medio tiempo con una ventaja de 9 (42-33).
En el tercer cuarto, con Duncan de vuelta en la cancha, Ginóbili agigantó aún más su figura y sumó otros 15 puntos. En su intento de reacción, el equipo norteamericano llegó a lograr un 12-2 que lo puso a 6 puntos de su rival (60-54), pero los dirigidos por Rubén Magnano resistieron la embestida y respondieron con dos triples consecutivos de Alejandro Montecchia y Rubén Wolkowyski y una jugada de cuatro puntos de Ginóbili para cerrar 70-57 el tercero.
En el último cuarto, a falta de 5 minutos, Estados Unidos perdió a su torre, Duncan, por llegar a las cinco faltas. Los argentinos manejaron de muy buena manera los últimos minutos de la mano de Scola y su victoria no estuvo en riesgo.
La ilusión tenía todavía un paso, del que se cumplirán 20 años este miércoles. La final fue ante Italia, y la gloria eterna.
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