El mes de noviembre comenzará con una serie de incrementos que, aunque se esperan a un ritmo más lento que en meses anteriores, seguirán impactando en los ya golpeados bolsillos de los argentinos. Los aumentos afectarán a servicios públicos, medicina prepaga, alquileres, combustibles y tarifas de taxis.
Aumento en tarifas de agua: A partir del 1 de noviembre, el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) verá un incremento del 4% en las tarifas de agua. Para los usuarios de ingresos altos, la tarifa promedio ascenderá a $25.000, mientras que aquellos de ingresos medios y bajos pagarán $22.000 y $18.000, respectivamente.
Suba en combustibles: aunque YPF y otras compañías no han definido el aumento exacto, se estima que los precios de los combustibles subirán alrededor del 5% tras el reciente incremento del barril de crudo Brent, que pasó de US$71 a US$76.
Aumento en prepagas: las empresas de medicina prepaga también aplicarán incrementos en noviembre, que variarán entre el 3,9% y el 6,9%. Estos aumentos no solo superan la inflación del último mes (3.5%), sino que en algunos casos la duplican
Alquileres: los contratos de alquiler firmados bajo la ley 27.551 verán un incremento del 227.3% a partir de noviembre de 2024. Por ejemplo, un alquiler de $100.000 pasará a costar $327.138 durante el próximo año, basado en el Índice de Contratos de Locación (ICL) del Banco Central, que toma en cuenta la inflación y los salarios.
Incremento en taxis: en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), las tarifas de los taxis aumentarán un 50% desde el 1 de noviembre. La ficha diurna pasará de $128 a $192, y la nocturna de $154 a $230. La bajada de bandera también verá un incremento significativo, pasando de $1,280 a $1,920 en horario diurno, y de $1,540 a $2,300 durante la madrugada.