Tesis sobre el automatismo humano, una fusión entre ciencia y teatro, es el título del espectáculo que se conocerá este domingo 3 de noviembre en La Manzana, y que involucra a un equipo que, como actriz-performer y también a cargo de la dramaturgia, la tiene Laura Pomponio, bajo la dirección compartida entre Ricardo Arias y Sofía Colusi, con asistencia de Brian Russo, diseño gráfico de Fernando Galassi y producción y prensa de Magali Drivet.
“Los límites del comportamiento humano, la normalidad, la finitud y la métrica de la sensibilidad embeben a la científica en un espiral de certezas e incertidumbres que sobrepasan las fronteras del conocimiento. Saber también puede ser ensordecedor”, adelanta el parte de prensa acerca de este singular material.
El tránsito por el desarrollo de una tesis doctoral real, llevada a cabo por Laura Pomponio, actriz y científica, dio lugar al encuentro entre la ciencia y el teatro. El trabajo es el resultado de un proceso de experimentación y creación, llevado adelante entre Ricardo Arias y Laura Pomponio con el objetivo de montar la obra.
“La actriz expone su tesis doctoral y la desarrolla ficcionalizándola en la búsqueda de un método que detecte el comportamiento anormal de las personas por medio de una casa inteligente y sensible; de este modo se logra reconocer y clasificar el comportamiento así como el sentir de los habitantes de la casa como normal o anormal”, agrega el texto.
Laura Pomponio es actriz, egresada en 1995 con ese título de la Escuela Provincial de Teatro Ambrosio Morante de Rosario, al tiempo que en 2009 se gradúa como Licenciada en Ciencias de la Computación por Universidad Nacional de Rosario. Además es Doctora en Ciencias de la Computación (Docteur Informatique) por la Unversité d’Aix-Marseille, Ecole Doctorale en Mathématique et Informatique (ED 184) Marsella, Francia, 2012.
La “segunda” tesis
“Este trabajo surgió en el Centro de Expresiones Contemporáneas (CEC) el año pasado. Laura (Pomponio) fue integrante de un grupo de Experiencia CEC que se fue disgregando en el transcurrir del año. Y llegado el momento de definir temáticas para el montaje, decidimos partir de su tesis doctoral ya que todo el tiempo aparecía la Laura científica y la Laura actriz. De este modo se fueron integrando en el montaje distintas realidades y discursos. Tratamos de imaginarnos una especie de segunda tesis o continuación de la original que Laura hizo para su doctorado en Francia. Ahora es científica del Conicet y también es egresada de la Escuela de Teatro Ambrosio Morante”, contó el actor, director y docente Ricardo Arias quien lleva adelante la Experiencia CEC hace muchos años.
“Fuimos construyendo la obra con formato de conferencia donde todo el tiempo tratábamos de ir un poco más allá de los planteos estrictamente científicos. Por momentos entrábamos en cuasi delirios entre místicos y cosmogónicos que lejos de escaparles tratamos de hacerlos verosímiles. En este devenir aparecen certezas e incertidumbres sobre la naturaleza humana, sobre el universo, sobre el origen de aquello que existe y conocemos y sobre lo desconocido”, sumó Arias.
Y profundizó: “Estas temáticas nos interpelaban sobre cómo la ciencia y la tecnología dan respuesta o no a las angustias propias vinculadas con la existencia humana. Nos preguntábamos sobre el rol de la tecnología puesta al servicio de la métrica y el control del comportamiento y de los sentimientos de las personas”.
“Fue un proceso difícil pero divertido. Con un resultado que lo trasciende porque además de tener un carácter personal importante, conlleva una toma de posición ideológica respecto del arte y las ciencias verdaderamente poco usual para alguien con los pies en el barro de la investigación científica aplicada”, destacó el director.
En el mismo sentido, y finalmente vinculado a la temática, Arias planteó: “La temática aborda la construcción de una casa ya no inteligente sino sensible. En ese sentido, vamos más allá de la inteligencia artificial. Planteamos un mundo hipercontrolado a través de la sensibilidad de los objetos y la propia casa. El comportamiento de las personas es clasificado como normal o anormal de forma taxativa a partir de esta casa y de un comité que establece los límites entre la normalidad y la anormalidad. Esto nos conduce hacia el automatismo humano en el que nuestras vidas son secuencias de actos o acciones que repetimos diariamente de forma constante, y nuestro comportamiento se reduce a una recurrencia permanente. Lo que se vuelve angustiante es el trasfondo filosófico e ideológico que conllevan estos abordajes ya no de investigación, sino como constructores activos de realidades que moldean la vida de las personas”.
Para agendar
Tesis sobre el automatismo humano, una fusión entre ciencia y teatro, se conocerá este domingo 3 de noviembre, a partir de las 20, en el Teatro de La Manzana (San Juan 1950), donde seguirá en cartel los restantes domingos del mes en el mismo horario. Las reserva de entradas se realiza a través del +549-341-2298779. https://api.whatsapp.com/send?phone=543412298779