La esposa de José Calderón recordó la brutal golpiza que al cabo de 28 días de agonía terminó con la vida del hombre de 40 años, quien fue atacado con piedras, patadas en la cabeza y hasta apuñalado cuando ya estaba inconsciente luego de que intentara frenar una pelea desatada a la salida del cumpleaños de 15 de su sobrina, en Puerto General San Martín. «Le pegaron un ladrillazo, lo patearon incansablemente, ya descompensado y desmayado en el piso. Es más, una vez inconsciente, una de las chicas lo apuñaló«, describió la mujer este lunes tras conocerse el fallecimiento.
Maira, la pareja de José y madre de sus dos hijas mellizas de 12 años, expresó el dolor por ese asesinato absurdo. “Éramos una hermosa familia”, describió. El hombre trabajaba en la Cooperativa de Portuarios. En una entrevista con Cadena 3, la mujer comparó el caso con el de Fernando Báez Sosa, el joven muerto a golpes por un grupo de rugbiers el 18 de enero de 2020 en Villa Gesell. “No puedo creer lo que hicieron estos monstruos”, señaló.
«Ya han pasado 28 días desde que mi marido tuvo que agonizar lamentablemente, porque eso es lo que pasó. Ni siquiera sabía que él estaba ahí hasta ese momento», siguió Maira sobre las circunstancias en que fue atacado.
La mujer recordó que José intervino para defender a su cuñado, a quien estaban agrediendo: «Él entra para defender, porque a mi hermano lo estaban matando, y es ahí donde lo agarra otro grupo de personas.
La brutal golpiza se inició al finalizar la fiesta de cumpleaños en un salón ubicado en Sabino O’Donell y San Lorenzo, de Puerto General San Martín. Eran cerca de las 3.30 de la madrugada del domingo 20 de octubre. Maira dijo que le había pedido a su esposo llevar algunas cosas a casa de su madre, que vive cerca del local de eventos. En ese trámite, José se topó con una pelea en la esquina, inicialmente entre chicas, y decidió intervenir para separarlas. Fue entonces cuando comenzaron a atacarlo a él, varias personas a la vez, hasta que cayó inconsciente. Su pareja afirmó que, incluso, una chica lo apuñaló mientras estaba desmayado en el suelo.
Poco después, algunos de los agresores se jactaron en redes sociales de haber dejado a su víctima en terapia intensiva. “Publicaban cosas como «dejamos tirado a un viejo ahí». Esto no puede quedar impune”, agregó con dolor Maira.
Recién cuando se calmó la pelea, muchos notaron que José estaba tendido en el piso. El hombre fue trasladado hasta el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, donde ingresó con traumatismo de cráneo, una herida cortante profunda en la zona occipital y en estado crítico, por lo que desde un principio tuvieron que asistirlo con respiración mecánica. “Estuvo sedado, operado, pero nunca se recuperó. Cuando despertaba, lloraba. Fue un calvario verlo sufrir”, repasó su pareja los días de la agonía.
La mujer reprochó la indiferencia de algunos padres de los agresores y la falta de colaboración de testigos que, dijo, temen represalias. “Pedí videos para aportar a la investigación, pero muchos tienen miedo. Lo que pasó fue gravísimo, y parece que algunos no lo entienden”, lamentó.
Por el hecho, tres personas están demoradas: Tomás C., de 19 años, al principio imputado por tentativa de homicidio, y dos menores que permanecen alojados en el ex Instituto de Rehabilitación del Adolescente Rosario (IRAR). La calificación se agravará por el fallecimiento de la víctima.
