Ferrazini, una empresa gráfica centenaria de Rosario, cerró sus puertas el martes pasado y un total de 53 empleados se quedaron sin trabajo. La tradicional firma había sido comprada en 2006 por Carton Pack Group, una empresa de capitales brasileños dedicada a la fabricación de embalajes para el sector del calzado. La decisión de bajar las persianas fue acompañada por el depósito de las respectivas indemnizaciones. Desde la Federación Gráfica de Rosario indicaron que no hay deuda salarial con el personal, responsabilizaron a la casa central de la firma por “errores administrativos” y por “elevar los precios de los productos hasta perder competitividad en el mercado local”. Representantes de los trabajadores y de la empresa se reunirán hoy, a las 10.30, en la sede local del Ministerio de Trabajo provincial. “Queremos la continuidad con otro grupo inversor. Vamos a defender las fuentes laborales”, aseguró Aldo Álvarez, secretario gremial de la Federación Gráfica de Rosario.
La imprenta Ferrazini era una empresa familiar que operó en el mercado rosarino desde fines del siglo XIX, en su local de Urquiza al 1900, hasta que en 2006 fue vendida a la brasileña Carton Pack, que la mudó a un local de calle Pavón 4928, en la zona sur de la ciudad, aunque mantuvo el nombre por ser una marca reconocida en el rubro. “El local estaba abandonado y con el esfuerzo de todos los trabajadores se consiguió restaurarlo y seguir adelante”, contó Álvarez a este diario.
“Cuando la empresa fue adquirida por esta firma de Brasil la producción se perfiló más al packaging, a las cajas de zapatillas y al troquelado de cajas, además de hacer impresiones y etiquetas. Tenía importantes clientes locales, pero los productos comenzaron a ser cada vez más caros. Armaban un presupuesto y en Brasil siempre lo elevaban entre un 20 y un 30 por ciento. Rosario tiene un mercado muy competitivo en este sector y eso la hizo caer, hasta su cierre definitivo”, indicó el dirigente de los gráficos.
Para Álvarez, el cierre de la firma fue “sorpresivo a medias, ya que se veía que las ventas venían en retroceso, según contaban los empleados de Ferrazini, aunque siempre la empresa cumplió con el pago de los sueldos”. Según el sindicalista, “la gerencia local anunció el cierre y enseguida depositó las indemnizaciones para los 53 empleados. Algunos tenían treinta años de antigüedad y otros son muy jóvenes”.
El secretario gremial de la Federación Gráfica de Rosario, al término de una reunión que mantuvo ayer con trabajadores de Ferrazini, sostuvo: “Le vamos a plantear a la empresa nuestros deseos de continuar para conservar los empleos y ver la posibilidad que la firma brasileña venda la fábrica a otra empresa que esté dispuesta a seguir adelante con la producción”. Álvarez dijo que pese a las promesas de Carton Pack de traer de Brasil una nueva impresora para ampliar la oferta y mejorar la calidad de impresión, “la empresa prefirió darle prioridad a la fabricación de cajas para zapatillas, sobre todo para la marca Reebok”.
“Me parece que un cúmulo de errores de la casa central (ubicada cerca de Porto Alegre) llevaron al cierre de la firma en Rosario. Estamos convencidos que la empresa es viable”, sostuvo Álvarez. Por su lado, Aldo Fabucci, encargado del área Rosario de la cartera laboral de la provincia, dijo que ambas partes fueron citadas para hoy a la mañana.
“La reunión en principio es para terminar de ver algunas cuestiones vinculadas al cierre, pero esto no tiene vuelta atrás, ya que la empresa cumplió con lo que manda la ley y depositó las indemnizaciones. Hay una situación lógica de angustia por parte de los trabajadores, que intentarán agotar las instancias para conservar sus empleos”, consideró el funcionario.