Bonus New Member
linitoto
dongjitu
Search

Un hombre le disparó a su mujer y se quitó la vida

Ocurrió en Huerta Grande al 1200. El marido murió en el acto y su esposa estaba grave en el Heca.

Nadie sabe qué pasó. Cuáles fueron los motivos que llevaron a Juan Alberto Scolari, de 50 años, a disparar contra su mujer, María Alejandra Marcual, de 45, para luego  quitarse la vida.

Ocurrió ayer, cerca de las cuatro de la tarde, en el dormitorio de la pareja, ubicado en la planta alta de la casa que habitaban desde hace muchos años, en Huerta Grande 1283 (bulevar Rondeau al 3500). La casa deja ver a las claras el buen pasar económico de la familia, de clase media, y las primeras imágenes en la puerta de la vivienda daban cuenta del trabajo que  hasta ayer llevaba el jefe de familia: cuatro camiones de soda de la firma Scolari se estacionaron en la puerta. Ninguno de los empleados daba crédito a lo que sucedía. El hombre murió en el acto, y la mujer se encontraba internada en el Heca, en grave estado, acompañada por su hija de 17 años, que fue quien presenció la escena y es la principal testigo que ayudará a esclarecer el caso.

Uno de los investigadores describió la escena del crimen. Es decir, la escenografía en la que yacía tirado el matrimonio. Cuatro notas o cartas esparcidas por la habitación eran el anticipo de un suicidio. La Policía sospecha que el hombre quiso suicidarse, y su mujer forcejeó con él para evitarlo. En ese forcejeo, la mujer recibió el disparo. Le ingresó en el cráneo, por la sien izquierda. Los investigadores sospechan que Scolari también se autodisparó del lado izquierdo, pero la bala salió por el lado derecho, lo que le provocó la pérdida de masa encefálica.

El arma que utilizó es una pistola 3.80, pero no es la única arma que la Policía encontró en la casa. Un fusil, una carabina, una escopeta, una Bersa 9 milímetros, y gran cantidad de municiones. La proliferación de armas de fuego, que la Policía sacó envueltas en una sábana y subió a un auto sin identificación policial, se debía a uno de los hobbies de la víctima: la cacería de carpinchos en la isla. Pero no era el único pasatiempo. La familia, que según los vecinos era “muy  unida”, viajaba mucho. Fotos en el Facebook muestran sus estancias en cruceros, viajes a Río de Janeiro, en  los que se los ve felices. La pareja, que según sus allegados no tenía problemas ni peleaba, solía bailar tango, una actividad a la que se dedica una de sus hijas, la mayor, de 21 años, en forma profesional. La muchacha, junto con su único hermano varón, de 18 años, no se encontraba en Rosario. Sólo la menor de 17 fue testigo de la tragedia.

Los vecinos no salían de su asombro. En la puerta de la casa se acercaron docentes de la escuela Provincia de San Luis, que queda a pocas cuadras de la vivienda, donde desde hace años María Alejandra se desempeña como maestra. Una de las docentes, y amiga de la mujer, contó que estaba sorprendida ya que se trataba de “un matrimonio normal”. Y el único episodio difícil que recordaba era que Scolari  hab{ia sido sometido a un by pass y tenía que cuidarse. Nada más.

<a href="https://www.concejomunicipalchia.gov.co/" target="_blank" rel="noopener noreferrer">Bonus New Member</a><br> <a href="https://linijaya.com/" target="_blank" rel="noopener noreferrer">linitoto</a><br> <a href="https://samka.go.th/" target="_blank" rel="noopener noreferrer">dongjitu</a><br>