Un joven de 27 años, que a comienzos de este año había salido de la cárcel de Piñero, murió tras recibir entre seis y ocho disparos durante un confuso episodio registrado en la tarde de ayer en una esquina de la zona oeste, en lo que la Policía presume fue un ajuste de cuentas.
El episodio se registró cerca de las 16, en Nicaragua y La Paz, cuando Maximiliano Emanuel Mansilla, que circulaba en una moto Guerrero Trip de 110 centímetros cúbicos, se encontró con al menos dos personas que se trasladaban en una Ford EcoSport o bien en una moto similar a la conducida por Mansilla, dijeron fuentes policiales.
En dicha intersección, y por causas que se tratan de establecer, se produjo una pelea que terminó en forma abrupta y a los tiros. Según voceros de la UR II, vecinos dijeron haber escuchado entre siete y doce disparos, aunque ninguno salió a la calle hasta varios minutos después.
Varios de los habitantes de la zona dieron aviso al 911 y unos minutos después llegaron al lugar patrulleros del Comando Radioeléctrico.
Cuando llegaron, hallaron a Mansilla sin vida, con varios impactos en su cuerpo. En el lugar, los pesquisas recogieron varias vainas servidas calibre 9 milímetros y una calibre 22. El fallecido tenía entre sus ropas algo de dinero y documentación, por lo que los investigadores descartaron un intento de robo.
Voceros policiales indicaron que la moto en la que se desplazaba Mansilla tenía un pedido de secuestro, ya que había sido denunciada como robada el pasado sábado 29 de enero, en la seccional 19ª.
El caso es investigado por personal de la sección Homicidios de la UR II junto a la subcomisaría 22ª, con jurisdicción en la zona, a las órdenes del Juzgado de Instrucción de la 11ª Nominación.