“El peronismo tiene un lío bárbaro que deberá resolver y del cual no nos queremos hacer cargo ni involucrarnos”, dijo el 31 de enero, hace poco más de 20 días, Oscar Cachi Martínez, presidente del partido 100% Santafesino, quien a menos de un mes de aquellas palabras se convirtió en candidato a vicegobernador de Rafael Bielsa, justamente por el justicialismo.
“Nosotros hemos definido claramente que la política de la provincia está obstaculizada y que hay figuras del justicialismo que ya deberían dar un paso al costado, y sin embargo uno los sigue viendo, y creo que eso nos distancia enormemente”, acotó aquél día, en medio de la campaña, cuando lo consultaron acerca de si iba a presentar su candidatura por adentro o por afuera del PJ, y se inclinó por la segunda opción.
El fin de semana pasado, en cambio, se concretó el acuerdo: Rafael Bielsa sumó en su fórmula al titular de 100% Santafesino, Oscar Martínez, para dar pelea en las primarias del 22 de mayo.
De ese modo, Martínez bajó su propia candidatura y aceptó acompañar al ex canciller. Los autores del acuerdo – los operadores Juan Carlos Mazzón y Carlos Carlozzi por la Casa Rosada, Alberto Maguid por UPCN y el diputado nacional Gustavo Marconatto– convencieron al líder de 100% Santafesino de las bondades de “ir por adentro”.
“Cachi” volverá a participar en elecciones por dentro del partido luego de ocho años: en 2003 y en 2007 compitió por la Intendencia santafesina con su propia fuerza. Cuando le preguntaron por sus críticas hacia el partido que lo vio nacer políticamente, Martínez aclaró: “Yo he sido muy crítico con quienes tuvieron la oportunidad de conducir la provincia, por la realidad que tenemos”. De ese modo, apuntó –sin mencionarlos– a los ex gobernadores Jorge Obeid y Carlos Reutemann.
“Lo que pedía era una autocrítica, y repensar el proyecto de provincia, nunca dejé de ser justicialista, quienes conocen la doctrina saben que el justicialismo es un movimiento que entiende que la política y el gobierno tienen que estar al servicio de la gente y no al revés”, agregó, para engalanar su regreso.
“He planteado con claridad que una provincia como Santa Fe no puede tener 400 mil jóvenes sin educación, trabajo ni capacitación. Que no tenga agua potable un tercio de la población exigía una autocrítica, exigía repensar un proyecto de provincia, corregir los errores y conformar un espacio que convoque y que nos permita encontrarnos”, explicó el precandidato a vicegobernador.
“Lo logramos a partir de este espacio. Y estoy seguro que vamos a ser una bisagra en la historia política de Santa Fe”, se esperanzó el titular de la Fundación Centro.
Bielsa también opinó: “Martínez ha sido crítico, pero hubo sectores del peronismo más que críticos: han sido injuriantes, soeces y maleducados conmigo. Sin embargo la política no se construye sobre las bases de contarle las costillas al dolor que uno sufrió. Uno tiene que transformar la experiencia en una conciencia que permita sumar voluntades. Los peronistas vamos a transitar una interna edificante, donde no va a haber agravios. Entonces, las críticas de los unos a los otros se van a concentrar en el plano de las propuestas”, comentó el ex canciller.
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