Las autoridades de Tokio habían recomendado el miércoles no dar de beber agua potable a bebés y niños menores de un año debido a la elevada radiactividad ocasionada por el desastre nuclear en Fukushima, según despacho de la agencia DPA.
Tras este anuncio, ya casi no quedaba botellas de agua mineral en Tokio y el gobierno de la ciudad llamó a las plantas que aumenten su producción.
La administración anunció que iba a poner a disposición agua embotellada para familias con niños menores de 12 meses. Alrededor de 80.000 hogares recibirán botellas de agua de 3,5 litros, informó la emisora japonesa NHK.
En la ciudad de Fukushima, a 75 kilómetros de la central nuclear que quedó severamente dañada por el terremoto y tsunami del 11 de marzo, se registró un nivel de radiación de 5,43 microsieverts por hora, según informó la emisora NHK.
En Minamisoma, a 30 kilómetros de la central nuclear se detectaron 1,42 microsieverts, mientras que en Iwaki, 50 kilómetros al sur de la planta de Fukishama los valores ascendían a 1,68 mikrosieverts.