Por Sabrina Pont y Matías Ortega, enviados especiales
El gobernador Juan Manuel Urtubey consegue su reelección en Salta, con un triunfo contundente que le permite consolidar su proyecto político, y la Casa Rosada sumaba un nuevo festejo en el calendario electoral, pese al esfuerzo del ganador por marcar distancia de la administración kirchnerista.
Procesado el 46,06% de las mesas, el Frente Justicialista Renovador de la Victoria (FREJUREVI) que llevó como candidatos a Urtubey y Andrés Zottos conseguía el 53,05% de los votos frente al 25,73% que obtenía la fórmula Alfredo Olmedo-Biella Calvet y el 9,33% que reunía otro binomio kirchnerista, el compuesto por Walter Wayar-Jorge Guaymas.
Por detrás se ubicaban el Partido Obrero (3.19%), la UCR (2,55), el Movimiento Proyectos Sur-PS (2.38%), la Coalición Cívica (1.67%) y el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados de Raúl Castells por (0.31%).
Con esta tendencia, el mandatario salteño cumplió con su objetivo de superar el 50% de las adhesiones de su provincia, con lo cual aspira a sumar poder interno para su segundo mandato de cuatro años y eventualmente luego buscar una candidatura presidencial en 2015.
Más allá de la diferencia, Olmedo consiguió uno de cada cuatro votos emitidos, lo cual le permite consolidarse con el jefe de la oposición en Salta, al tiempo que le garantiza un caudal a su referente nacional Mauricio Macri en el octavo distrito electoral del país, que representa el 2,8 por ciento del padrón nacional.
El dato distintivo de la contienda salteña significó la puesta en marcha del voto electrónico a gran escala que se reveló eficiente, pese a que generó algunas demoras en mesas.
El buen desempeño de Urtubey se posicionaba cerca del máximo guarismo obtenido por un gobernador, que fue alcanzado por Miguel Ragone en 1973 con el 57,9 por ciento de los votos. La provincia fue intervenida durante el gobierno de Isabel Perón y Ragone fue secuestrado en marzo de 1976 y permanece desaparecido.
Urtubey fue enfático en su intención de «desnacionalizar» la elección durante la campaña y se animó a decir que no es kirchnerista con el resultado puesto, pero al mismo tiempo ratificó su respaldo a la administración nacional.
En ese marco, anticipó que en la semana viajará a Buenos Aires para entrevistarse con la presidenta Cristina Fernández y renovarle su apoyo para que busque su reelección.
Más allá de la toma de distancia evidente del gobernador, para la Casa Rosada significó otra sonrisa en la carrera electoral hacia octubre luego de la victoria en Catamarca y la reñida elección en Chubut, donde el ganador todavía está pendiente.
Sumados los votos de Urtubey y Wayar, la adhesión de los salteños a las ofertas respaldadas por la Casa Rosada llegaba hasta el 60 por ciento de los sufragios.
En la elección votaron cerca de 600 mil de los 812 salteños habilitados (un 74 por ciento) y un tercio de ellos lo hizo a través del sistema de voto electrónico.
Uno de los que votó con la nueva modalidad fue el gobernador, luego de haber esperado una larga fila de antecesores para hacerlo en la mesa 1722 escuela 25 de Mayo de la capital provincial.
«En Salta se vota gobernador, no un delegado del gobierno provincial», remarcó el mandatario al mediodía para tomar nuevamente distancia de la Casa Rosada.
Wayar había sido el primero de los tres principales candidatos en acercarse a la urna en la localidad de Cachi y Alfredo Olmedo votó en la localidad de Las Lajitas.
Luego los tres se ubicaron en sus búnkers de la capital salteña. Urtubey llegó cerca de las 17:00 al hotel provincial con una sonrisa a partir de los resultados que le otorgaban sus encuestados Roberto Bacman, Antonio De Tomaso y Ricardo Rouvier.
Además de gobernador y vice, los salteños eligieron 30 diputados y 11 senadores provinciales para la renovación parcial de la Legislatura, 59 intendentes y 318 concejales.
