El entrenador, Angel Cappa, hoy se despidió de los futbolistas del Lobo luego de ser destituido de su cargo tras caer como local frente a Newell’s, y afirmó que «pensaba» que su proyecto «debía continuar» pese a los malos resultados, pero reconoció que la decisión no lo sorprende por la «histeria» que se vive en el fútbol argentino.
«Yo pensaba que este proyecto debía continuar, pero en este fútbol no me sorprende nada», dijo Cappa y agregó que «los dirigentes entendieron que era momento de interrumpir este proceso y buscar un nuevo rumbo».
El ahora ex entrenador del ‘Lobo’, quien arribó pasadas las 9.15 al predio de Estancia Chica para despedirse de los futbolistas.
«Me parecía que el compromiso era hasta el final y no me dejaron. Gimnasia tiene que poner un punto y decir ‘comienzo una nueva etapa’, si no caminará siempre por un alambre», sentenció el entrenador en declaraciones a TyC Sports.
De todos modos aceptó: «También los entiendo (a los directivos), es muy difícil soportar las presiones en este clima histérico que se vive en el fútbol argentino. Ahora por lo menos van a zafar un par de partidos».
Además, Cappa evitó polemizar con la dirigencia que encabeza Héctor Delmar, pero destacó que el presente futbolístico y deportivo de Gimnasia está muy relacionado con lo hecho en los últimos años.
«(Gimnasia) Lleva tres años así. Me siento responsable pero junto con los que estuvieron antes», dijo el ex técnico de River, y lanzó: «Nunca traicioné lo que yo pienso que debe ser el fútbol. Yo no tuve tiempo, no hay nada que se pueda corregir sin tiempo. Lo normal es que uno tarde un tiempo en reconstruir todo lo que esta deshecho».
Por último, Cappa señaló que «lo que suele ocurrir es que cuando se va un entrenador los jugadores se liberan de ese compromiso y espero que ellos lo logren. Los partidos que quedan son muy difíciles pero no imposibles, porque salvo Vélez que es el mejor con mucha diferencia, los demás somos todos iguales».
