Oscar Gregorio Camino, de 43 años, primo hermano del asesinado ex jefe de la barrabrava rojinegra, Pimpi Camino, fue detenido ayer por la madrugada cuando llegaba a la casa de su pareja, en barrio Las Flores. Los investigadores indicaron que este hombre, quien otrora fuera lugarteniente de un conocido narco del sudoeste rosarino, fue el organizador de una megafuga de la Alcaidía mayor de Jefatura que tuvo lugar en febrero del año pasado.
El jefe de la Agrupación Unidades Especiales de la UR II, Néstor Arizmendi, relató a El Ciudadano que, tras una serie de investigaciones, se determinó que el prófugo iba a visitar a una mujer, con la que posee una relación sentimental desde hace mucho tiempo, a su vivienda de Jazmín al 7100, de barrio Las Flores.
“Fue una operación muy importante porque Oscar Camino es un referente del narcotráfico en Las Flores”, explicó Arizmendi. “Además creemos que posee una estrecha vinculación con varios hechos de sangre que se vienen sucediendo a lo largo del año en ese barrio”, agregó.
El jefe de AUE explicó que la detención se produjo en la puerta de la vivienda de la zona sudoeste. “El personal policial lo tomó por sorpresa, por lo que no pudo reaccionar. No se resistió. Quedó alojado en el penal de la Alcaidía, desde donde será trasladado hacia Coronda”, precisó el investigador.
La posibilidad del traslado a la Cárcel Modelo surge del temor de que Camino protagonice otra fuga, como la que ocurrió el 28 de febrero de 2010.
Ese día, efectivos de la sección Economato fueron al Pabellón 3 para entregar las raciones de comida. Uno de los uniformados ingresó con un arma de fuego, y fue atacado por varios presos que en un instante lograron quitarle la pistola. Con el policía como escudo humano, el grupo avanzó hacia la guardia y se apoderó de dos escopetas 12.70 cargadas con postas de goma. Los presos avanzaron hacia el exterior, y se desató un tiroteo por los pasillos de la Alcaidía. Como consecuencia de la balacera, dos policías resultaron heridos.
En tanto, los reos se fugaron en una camioneta de Economato que estaba estacionada en la puerta y encararon hacia el portón principal de la alcaidía. Tuvieron la “suerte” de que la inmensa reja de hierro que da sobre Francia estaba abierta. Según el relato de varios testigos, la chata, en cuya caja se habían ubicado la mayoría de los pasajeros, salió como un bólido descontrolado por Francia hacia el norte al compás de los disparos efectuados por los policías de la guardia.
“Fue el ideólogo de la fuga de la Alcaidía y se investiga si tuvo alguna relación en los homicidios que se sucedieron a lo largo de este año”, remarcó otra fuente policial.
Un referente de Las Flores
Oscar Gregorio Caminos tiene varios antecedentes penales. En 2002, cayó en Las Flores, sindicado como el lugarteniente del Colorado Arriola, quien hasta ese momento controlaba el narcotráfico en ese barrio de la zona sudoeste. Fue detenido junto con otras diez personas, entre ellas la mujer del Colorado, a quienes se les secuestraron 150 kilos de marihuana, armas y automóviles. Unos días después Arriola fue apresado en la ciudad cordobesa de Villa Carlos Paz. Por este hecho, el Juzgado Federal Nº 3 condenó a Camino a la pena de 7 años de prisión.
Además, al primo de Pimpi se le achacaron un facilitamiento de evasión que data del 21 de diciembre de 2002 y una detención por portación de armas.
Asimismo, se lo señaló como uno de los partícipes del homicidio de Francisco Ponce, ocurrido el 19 octubre de 2008, en la esquina de pasaje Belén y Clavel, en barrio Las Flores. La víctima fue atacada cuando se encontraba con dos hermanos de 6 y 13 años, quienes también resultaron heridos.
Los plomos que terminaron con la vida de Poce partieron desde el interior de un Peugeot 504 en el que viajaban tres personas. Ponce recibió disparos de escopeta en el abdomen, tórax y brazo, por lo que fue derivado al Hospital Roque Sáenz Peña, donde falleció a las pocas horas de ingresar. Camino estaba sindicado como la persona que conducía el Peugeot 504, y quedó involucrado en el hecho junto con otros dos nombres: su hijastro, apodado Nano, y Marcelo Coty P.
En 2009, Camino fue detenido en otra causa por infracción a la ley de estupefacientes. En junio de ese año, un hombre identificado como Alejandro Carau Quevedo fue apresado mientras transportaba un kilo de pasta base desde la localidad de Alvear hasta Rosario. Tenía también en su poder una pistola calibre 40 con 11 proyectiles con punta de teflón capaces de atravesar chalecos antibalas, 13 mil pesos en efectivo y un bidón con acetona, elemento utilizado para la fabricación de la droga. Tras ello, la Policía allanó la vivienda de Quevedo, en América al 2100 de Alvear. Allí secuestraron otros 100 gramos de pasta base, un litro de amoníaco, 15 litros de acetona, y otros precursores químicos de los utilizados para el estiramiento de la droga. También había allí, dijeron los pesquisas, unos 5 kilos de material de corte (para estirar la cocaína), municiones de diferentes calibres, teléfonos celulares y una olla que dio positivo para cocaína al ser sometida a los reactivos químicos.
En las horas siguientes de que la cocina fuera desarmada, se realizaron una veintena de allanamientos en los que se detuvo a 10 personas, entre ellas Camino, que era buscado por el crimen de Ponce.
Luego, ya en 2010, Camino terminó por fugarse de Alcaidía junto a un grupo de presos. Otro de los crímenes en los que Camino fue mencionado fue en el doble homicidio de los policías de la localidad entrerriana de Diamante, ocurrido el 4 de julio del año pasado.
Según deslizó una alta fuente de la investigación, Camino habría tenido alguna participación en el hecho. Sin embargo, el único que hasta el momento está imputado, considerado autor material de los asesinatos, fue Rubén F., alias Chueco, quien supo compartir andanzas delictivas con Oscar en la banda del colorado Arriola.
La ejecución de los uniformados diamantinos tuvo lugar cerca de las 3.10, cuando Marcelo Muñoz, de 25 años, y Elio Zárate, de 43, recorrían el centro de la ciudad y vieron a un sujeto con un bolso. Zárate se bajó de la patrulla, al parecer sin el arma, y se dirigió al individuo, quien sacó una pistola y le disparó dos veces. Entonces intentó bajar del móvil Muñoz, quien también fue ejecutado de dos tiros y sobrevivió hasta poco después de llegar a un hospital.
El Chueco cayó unos días después en una isla ubicada frente al Club Náutico de Diamante. Fue procesado poco después.