Un hombre de 40 años apodado Gordo, radicado en Florencio Varela, provincia de Buenos Aires, fue procesado por los delitos de robo calificado y asociación ilícita, en el marco de la causa que investiga el accionar de una banda dedicada a las salideras bancarias. Las imputaciones son por hechos cometidos entre 2009 y 2010, en los cuales el imputado aparece filmado por las cámaras de video de al menos cinco sucursales, por lo que se investiga si hizo las veces de entregador, confiaron fuentes judiciales.
El acusado, identificado como Gustavo Juan A., fue detenido el 1º de septiembre del año pasado durante un allanamiento realizado en su casa de Finochieto al 600 en la localidad de Florencio Varela, provincia de Buenos Aires, luego de que la Justicia rosarina encontrara pruebas contundentes sobre su participación en señalar a siete víctimas de salideras bancarias ocurridas en esta ciudad.
El primer hecho en el que aparece filmado, indicaron fuentes del caso, ocurrió alrededor de las 11.50 del 4 de septiembre de 2009, cuando un hombre ingresó a la sucursal del Nuevo Banco de Santa Fe de Mendoza y Lavalle, en barrio Echesortu, para cambiar cheques por un valor total que rondaba los 25 mil pesos. Mientras el cliente realizaba la transacción por ventanilla, el ahora imputado –de manera sospechosa– daba vueltas en la zona de cajas para luego entrar y salir del hall de la entidad crediticia. Una vez que la víctima culminó con su operación en la caja 3, guardó el dinero en un bolso de tela negro y otra parte en sus bolsillos. A esa altura de la maniobra, Gustavo estaba apostado en la fila de clientes del banco desde donde monitoreó toda la situación.
Al salir de la sucursal bancaria de barrio Echesortu, el cliente se encontró con su esposa, que estaba embarazada, y unos instantes antes retirado mil pesos de un cajero. Luego, emprendieron juntos el viaje de regreso hasta la empresa familiar, ubicada en dicho barrio.
El esposo estacionó en Montevideo al 3800 y, cuando la pareja se disponía a bajarse de la Eco Sport roja, dos hombres en un Peugeot 206 color champagne los sorprendieron y a punta de pistola le exigieron al hombre que entregara todo el dinero con una expresión particular: “Bajate policía, dame la plata”.
Tras la orden, el conductor del 206 descendió también del auto, fue hasta el lado de la acompañante, apoyó un arma en la cabeza de la señora y le arrebató la cartera deportiva que llevaba con 1.400 pesos y documentación personal del matrimonio. En su declaración, las víctimas resaltaron que los ladrones, quienes actuaron a cara descubierta y armados, confundieron el bolso de la mujer con el maletín que llevó el hombre hasta el banco y donde guardó la plata. “El bolso de mi marido no lo vieron porque quedó en el asiento trasero. Venían a buscar esa plata, los 25.700 pesos, pero se pensaron que era mi cartera”, estimó en su momento la señora.
Luego de este episodio, la fisonomía del Gordo Gustavo empezó a aparecer en las filmaciones de muchas de las entidades bancarias de Rosario con la particularidad nada casual de que, luego de su paso por cada banco, aparecían denuncias de clientes por la sustracción del dinero extraído esa jornada, todos bajo la modalidad salidera.
Además del asalto de septiembre de 2009, el hombre aparece en las imágenes de la sucursal del Banco Nación ubicada en Juan José Paso y avenida Alberdi, el 2 de diciembre de 2009; el 22 de enero de 2010 en las casa que el Banco Francés posee en avenida Alberdi al 800; el 3 de febrero del mismo año en el edificio que el banco Santander Río tiene en Mendoza y Alsina, y el 30 de julio de 2010, otra vez en el local del Banco Nación de Alberdi y Juan José Paso. En todos los casos, las víctimas dieron detalles similares, entre ellos que los delincuentes se dieron a la fuga a bordo de dos autos, uno de los cuales resultó ser un Peugeot 206 color gris y en todos los casos, ese día, el Gordo aparecía en las imágenes de video del interior de las sucursales.
El hecho por el cual terminó detenido, y desde esta semana procesado, tuvo lugar en la sucursal del Banco Santander Río de avenida Pellegrini al 1200, el 2 de agosto del año pasado. En dicha oportunidad fue señalado por vigiladores privados de la entidad, quienes dieron aviso al personal de la sección Seguridad Bancaria de la UR II. Pero el Gordo se dio cuenta de la maniobra y optó por realizar una operación comercial, para luego retirarse de la entidad a bordo de un automóvil marca Chrysler Neon, color azul.
Luego de una rápida investigación, el Gordo fue detenido por orden de la jueza de Instrucción de la 12ª Nominación, Mónica Lamperti, en su vivienda de Florencio Varela. Esta semana, el hombre fue procesado por robo calificado por el uso de arma de fuego y asociación ilícita como presunto integrante de una banda especializada en salideras bancarias. La imputación no está firme, ya que la defensa del detenido presentó una apelación. En tanto, la investigación continúa, ya que los autores materiales de las salideras siguen en libertad.
