La presidente Cristina de Kirchner fue recibida por el presidente del Consejo de Ministros de Italia, Silvio Berlusconi, en el palacio Chigi en Roma, en el marco de su gira internacional que ya la llevó a México en busca de relanzar las relaciones bilaterales con ambos países.
La mandataria había mantenido previamente un encuentro con el presidente de Italia, Giorgio Napolitano, en el palacio Quirinale, sede de la presidencia.
«Yo soy descendiente de españoles, pero en mi país el que no desciende de españoles, desciende de italianos», dijo Cristina al saludar a Napolitano, ante los periodistas acreditados.
Napolitano agradeció sonriente las palabras de la mandataria, con la que luego dialogó en el salón Bronzino de la sede presidencial.
Del encuentro, que se extendió por alrededor de 40 minutos, también participaron el canciller Héctor Timerman y los ministros de Planificación, Julio De Vido; y de Agricultura, Julián Domínguez; así como también el secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde; y el embajador en Italia, Torcuato Di Tella.
Cristina llegó ayer a Roma para participar de los festejos por los 150 años de la unificación de Italia.
