La reacción de Lewis Hamilton tras ser investigado y sancionado después del pasado GP de Mónaco pudo tener peores consecuencias para el piloto británico. Según desvela ahora Jean Todt la sanción podría haber sido ejemplar.
El presidente de la FIA revela que Hamilton, acompañado por su padre, fue a pedirle perdón y que después recibió una carta volviendo a excusarse ante el máximo dirigente del automovilismo mundial. Lewis se quejó de los comisarios, de Massa y de Maldonado, incluso llegó a decir que «me tratan así por ser negro, como dice Ali G».
«Para mí Lewis dijo algo que era inaceptable, pero yo no quería reaccionar de forma exagerada. Podría haber pedido a nuestros tribunales judiciales resolver el problema pero nunca se abrió oficialmente un caso. Fue a los comisarios a pedir disculpas. Fue con su padre. Tal vez hubiera sido mejor ponerlo en manos del tribunal, que le habrían prohibido competir durante seis grandes premios, pero me escribió una carta a mí, yo le escribí a él y asunto terminado», explica Jean Todt. Pues eso, que asunto terminado. Y aviso dado.