Informe de Liliana Franco, desde el Museo del Bicentenario en Casa Rosada
La presidente Cristina de Kirchner confirmó que la Argentina le dará su voto a Ban Ki-moon para la reelección al frente de la Secretaría General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Luego de una entrevista a solas en la Casa Rosada, la mandataria y el titular del organismo internacional dieron una conferencia de prensa conjunta. «Vemos con beneplácito su reelección», le dijo Fernández a Ban Ki-moon, a quien ofreció «disculpas por los inconvenientes» que tuvo en su viaje procedente de Bogotá debido al cierre de los aeropuertos de Buenos Aires por las cenizas volcánicas de Chile.
«Siempre hemos ponderado que es el ámbito de la Naciones Unidos donde se deben resolver los conflictos entre los países», afirmó Cristina al inicio de su exposición, antes del agasajo con un almuerzo en el Museo del Bicentenario. «La ONU debe significar la casa común de todos los país democráticos para encontrar soluciones», completó.
La jefa de Estado informó que durante el encuentro a solas le reiteró el reclamo al Reino Unido por la soberanía de las Islas Malvinas. «Le hemos expresado que Inglaterra acepte la resolución 2065 y sus concordantes para que se siente en la mesa de negociaciones junto con la Argentina para discutir la soberanía de las islas Malvinas», expresó.
«Las resoluciones de la ONU deben ser aceptadas por todos, pero más aún por los países más desarrollados porque cuanto más desarrollados son, más responsabilidad tienen», agregó.
A su turno, Ban Ki-moon destacó que la Argentina está próxima cumplir todos los objetivos del milenio que fija la ONU para los países en desarrollo, destacó el rol de la mujer al frente del Gobierno y su liderazgo de la Presidente en la región y elogió la política de derechos humanos del país.
Además, el secretario general convocó a la Argentina a participar de una cumbre sobre seguridad nuclear después del desastre de Fukushima en Japón. Ban Ki-moon aclaró que si bien cada país es libre de desarrollar la energía nuclear, es importante tomar los recaudos necesarios para evitar cataclismos.
Al término de la conferencia, la mandataria invitó al titular de la ONU a recorrer el recientemente inaugurado Museo del Bicentenario, para luego ofrecer un almuerzo en su honor en ese lugar. Es la primera vez que allí se brinda una ceremonia de este tipo.
El Gobierno amenguó la comida con un quinteto musical. En total, se dispusieron unas 40 mesas para los comensales con arreglos florales de combinación rosas rojas y naranjas. El invitado principal se sentó entre la jefa de Estado y el senador y presidente provisional del Senado, José Pampuro.
Pero además, están presentes funcionarios nacionales, gobernadores, empresarios, legisladores y dirigentes sociales y políticos. Amado Boudou, Florencio Randazzo, Diego Bossio, Marcó del Pont, Agustín Rossi, Fernando Braga Menéndez, José Luis Manzano, María del Carmen Alarcón, Luis D’ Elía, Daniel Siocli, Jorge Capitanich, Estela Carlotto, Osvaldo Cornide, Alicia Kirchner y la secretaria ejecutiva de Cepal, Alicia Bárcena, entre otros.
El sobrevuelo de las cenizas volcánicas por la ciudad de Buenos Aires obligó a postergar la audiencia entre Cristina y Ban Ki-moon. El inicio del encuentro que estaba previsto para las 11.30, pero finalmente se produjo a las 12.45. Según contó la mandataria en la conferencia, en la Casa Rosada se lo recibió «con mayores grados que otros mandatarios», aunque no pudo evitar comentar una «anécdota de color»: por las cenizas, Ban Ki-moon tuvo que aterrizar por la madrugada en Córdoba y viajó en un micro durante ocho horas hasta la Capital Federal. En una parada intermedia sobre la ruta, el mandatario y toda la comitiva que lo acompaña bajaron a desayunar alfajores rosarinos en una estación de servicio.
La agenda de Cristina continúa con la promulgación de la ley antitabaco en un acto en el Salón de las Mujeres a las 19.