Una denuncia sobre prostitución infantil en un asentamiento precario de la zona oeste derivó en un allanamiento que dio resultados negativos en cuanto a la corrupción de menores, aunque derivó en el desbaratamiento de un quiosco de venta de drogas y en la detención de un joven de 22 años.
Efectivos de la División Judiciales de la Unidad Regional II irrumpieron anteanoche en una casilla ubicada en inmediaciones de Felipe Moré y las vías con la finalidad de constatar si había menores ejerciendo la prostitución, con una orden de la jueza de Instrucción de la 6ª Nominación, Raquel Cosgaya.
Pero una vez en el interior de la vivienda, a la que se accede por uno de los pasillos de Felipe Moré al 600 bis, se toparon con un muchacho de 22 años que tenía sobre la mesa unos 200 envoltorios de nylon con cocaína preparada para la venta.
Por eso intervino en el operativo la Brigada Operativa Departamental Rosario de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones, que dio intervención al Juzgado Federal en turno, bajo cuya jurisdicción quedó detenido Jonatan Alfredo R., de 22 años.
Voceros del caso informaron que el peso total de la droga secuestrada es de 140 gramos de cocaína y además que en el lugar se incautó un teléfono celular, 560 pesos en billetes de distinta denominación y cuadernos con diversas anotaciones.
Una fuente de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones dijo que en lo que va del año ya se realizaron dos allanamientos con resultados positivos en casillas ubicadas en el mismo pasillo en el que irrumpieron anteayer.
Aunque aclararon que el último operativo se llevó a cabo para constatar una denuncia que daba cuentas de que en ese lugar dos adultos, que están identificados y son buscados por la Policía, eran responsables de prostituir a menores de edad.