El mediocampista Diego Valeri firmó la renovación de su contrato con Lanús por dos años y le puso así punto final al conflicto que lo había enfrentado los últimos días con la dirigencia del club y que amenazaba con tenerlo inactivo durante toda esta temporada.
«Por suerte se acercaron las posturas y firmé. Pensé que iba a estar un año sin jugar pero se resolvió», explicó Valeri en el programa Un buen momento, de Radio La Red.
El acuerdo ya había sido sugerido previamente por el presidente de Lanús, Nicolás Russo: «Hubo un acercamiento. El acuerdo está bien encaminado. Las dos partes hemos cedido y ahora podemos decir que faltan detalles», había resaltado el directivo.
«Estamos esperanzados en que se llegará a un arreglo. Nunca hubo una pelea. Acá la cuestión siempre fue económica. Diego tiene ganas de jugar en Lanús y nosotros queremos que se quede», agregó.
Valeri había sido separado del plantel que conduce el técnico Gabriel Schurrer hace casi dos semanas, luego de negarse a firmar la renovación del vínculo, por motivos económicos; y de hecho estuvo ausente en el partido que su equipo le ganó ayer por 1-0 a San Lorenzo, en el inicio del torneo Apertura.
Durante estos días de conflicto, Vélez Sarsfield y River Plate se habían mostrado interesados en su pase, tasado por los dirigentes de Lanús en cinco millones de dólares.