El argentino Sergio `Maravilla` Martínez, campeón de Diamante de los medianos del CMB, enfrentará esta noche al inglés Darren Barker, en el Boardwalk Hall de Atlantic City, el mismo escenario donde noqueó en forma espectacular al local Paul Williams.
«Maravilla» Martínez, pondrá en juego el cinturón de Diamante de los medianos del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) ante el invicto británico, en pelea que será transmitida en directo desde las 23, por TyC Sports.
Martínez volverá a combatir en el Boardwalk Hall, un lugar muy caro para sus sentimientos. Fue allí donde noqueó en forma fulminante en dos rounds al norteamericano Paul Williams en noviembre pasado.
Ahora Martínez llega a esta pelea ante Barker como amplio favorito para la prensa y los aficionados que lo tienen en una excelente consideración, a tal punto que lo sitúan entre los tres mejores boxeadores de la actualidad, junto a Manny Pacquiao y Floyd Mayweather.
Como ocurrió en su última pelea, cuando venció por fuera de combate al ucraniano Serhiy Dzinziruk en Foxwoods Resort, de Connecticut, en marzo pasado, el día que el Consejo Mundial puso en juego el cinturón de diamantes – valuado en 50 mil dólares- para “calmarlo”, tras haberle retirado el título de campeón regular mediante una maniobra poco clara por parte de la entidad con sede en México.
Precisamente el CMB declaró desierto el título mediano que alguna vez lució en forma brillante, Carlos Monzón, para darle una oportunidad al mexicano Julio César Chávez junior, quien ganó luego esa corona ante el alemán Sebastian Zbik, que era el titular interino.
Para «tapar» esa maniobra realizada por el presidente del CMB, el mexicano José Sulaimán, se declaró a Martínez como campeón Emérito, una especie de “supercampeón” que no conformó al argentino, quien se consideró «despojado».
A pesar de las promesas de Sulaimán de ordenar en un futuro inmediato una pelea unificatoria entre Martínez y Chávez junior, ese enfrentamiento se sigue dilatando.
Barker (23-0-0/ 14 nocauts) de 29 años, será un obstáculo que tendrá que sortear yluego a pensar en posibles rivales para «la gran pelea». Seguramente, Martínez y su equipo tendrán que esperar para la concreción del pleito soñado hasta los primeros meses de 2012.