Ellas son mamá y mamá, y festejan doble la fecha que se celebra hoy porque conformaron familias comaternales, muchas de las cuales pudieron anotar a sus hijos con los dos apellidos, mientras otras esperan que se amplíen los derechos tras la sanción de la ley de matrimonio igualitario.
“Una nena, compañerita de la sala de tres, nos vio llegar a la puerta del jardín, y pasándole la mano por el hombro a Santi le dijo: «¡Qué suerte, hoy vinieron tus dos mamás!» Y sí, algunas cosas ya están cambiando…”, cuentan en su blog ellalostrillizosyyo Silvina Maddaleno y Andrea Majul, mamás de Abril, Jazmín y Santiago de 4 años.
Maddaleno aporta que los trillizos “tienen muy claro que hay familias diversas, no sólo por la orientación sexual y de género, sino porque hay chicos sin papá o mamá o que viven con sus abuelos”.
Un día, un compañerito le dijo a Abril en secreto que tenía que también tener un papá. La nena contó la anécdota a sus mamás y les dijo: “Lo que pasa es que él no sabe que hay familias distintas”.
“El domingo esperamos regalos las dos”, confiesa Maddaleno, periodista al igual que su esposa, mientras ajustan los preparativos para la reunión familiar.
Florencia
Florencia Gemetro contesta el teléfono con el llanto de su bebé de fondo. Es militante de Lesmadres, “un grupo de acción política integrado por familias de lesbianas madres y futuras madres que decidimos tener hijas e hijos en pareja”, explica como puede ella misma.
Prefiere no hablar de su caso particular, pero aprovecha la celebración para remarcar “la importancia del Registro de Familias LGBT con hijos e hijas que se enmarca dentro de la campaña «Todas las familias con todos los derechos»”, que realizan junto a 100% Diversidad y Derechos.
Hasta el momento hay 243 familias anotadas, de las cuales 188 son comaternales. La mayoría de las parejas tiene más de un hijo y un 15 por ciento son embarazos múltiples. Además, son relevantes los casos en que parieron ambas mamás, según datos provisorios del registro.
“La información recolectada es de gran importancia para avanzar en la inscripción de todos los hijos e hijas independientemente de la orientación sexual, la identidad de género o el estado civil de sus madres o padres, con el propósito de promover más y mejores políticas públicas para nuestras familias y para nuestra comunidad”, aporta Florencia.
La dirigente aclara que la recolección de los datos es confidencial y se lleva acabo a través de un formulario digital también disponible en el blog reconocimientoigualitario.blogspot.com.
Marta
En el mismo sentido se orienta Marta Dillon, editora de Las 12 y Soy, suplementos del diario Página|12, para quien el mejor festejo por el día de la madre “es que se avance en el reconocimiento legal de las hijas e hijos nacidos antes de la ley de matrimonio igualitario”.
Es lo que espera Furio, el hijo que tuvieron con la cineasta Albertina Carri en 2008, parto que Marta relató en un correo enviado a la red feminista Rima, donde contó que su esposa parió “en casa”, y no sólo eso: “En nuestra biblioteca, por pura casualidad, abrazada a mí que la sostuve con una fuerza que no sabía que tenía. Rodeada por un equipo de partera, obstetra y neonatólogo que supieron guiñarse el ojo para hacer una episiotomía a último momento, porque nuestro niño había girado el cuello. Y que no paraban de dar aliento: «¡Vamos Albertina!, vamos chicas, está ahí, tocalo, llamalo, empujalo»”.
Adriana y Florencia
El anteproyecto de inscripción de estos niños “cuenta con dictámenes favorables de diferentes ministerios y organismos públicos y, en este momento se encuentra en la Secretaría Legal y Técnica de la Presidencia”, anticipa Gemetro, siempre militante.
“Será una excusa perfecta para comernos un asado con toda la familia” dice Dillon. Y lo mismo va a ocurrir hoy en Rosario, en la casa de Adriana Gryciuk y Florencia Nasazzi.
Ellas son mamás de mellizas de 5 meses, que hacen el deleite de la abuela, que de pronto suena a niñita cuando interactúa con las nenas.
Las rosarinas son la primera pareja lesbiana cuyas hijas figuran en la partida de nacimiento, de matrimonio y sus documentos de identidad, con el apellido de las dos mamás.
Y no sólo eso. También las bautizaron. “Un día me metí en la iglesia Inmaculada Concepción de María, hablé con el cura y las bautizamos junto a otros 16 bebés. Fue muy fuerte, porque hubo cero discriminación” relata Gryciuk.
Las mamás preparan un gran asado para el domingo “con amigos porque tenemos mucho para festejar. Yo tengo 56 años y no puedo creer todavía la maravilla de la vida, la ternura de las bebas en un mundo donde hay tanta maldad”.
Emilse y Juana
Desde Tucumán, Emilse y Juana –mamás de Eleonora de 3 años– sienten que con la aprobación del matrimonio igualitario “empezaron a vernos como una familia, dejamos de ser las tías hipotéticas de Eleonora para ser sus mamás ante los ojos de los vecinos, la maestra del prejardín y hasta para nuestras familias; por eso vamos a festejar el domingo yendo a la plaza a tomar mate y a jugar con nuestra perrita”.
Parejas LGBT se reunieron el 26 de septiembre en esa provincia convocados por la organización Crisálida, presidida por Gustavo Díaz Fernández, quien aportó también el testimonio de Luisa y Mariana que esperan su primer hijo para noviembre.
“El día de las madres –dice risueña Mariana– lo pasaremos con mi mamá. Estuvimos peleadas hasta que se enteró que estaba embarazada y me vino a buscar. Hablamos de lo que nunca hablamos antes y hoy es una abuela ultra obsesionada que quiere darme consejos de todo”.
Para las mamás que ya transitan preescolares y escuelas, el Día de la Madre no es conflictivo en el ámbito educativo, porque la diversidad ha impulsado que se festeje el día de la familia. Diversidad que esperan siga transitando todos los espacios sociales, sin prejuicios ni discriminaciones.