Con la salvedad de que se trata de un espacio productivo emergente y por lo tanto la información sobre el mismo es incompleta, el gobierno provincial afirma que Santa Fe es el segundo distrito del país en producción de videojuegos, un sector enfocado en el mercado global que, hasta el momento, cuenta con alrededor de 20 empresas asentadas en territorio provincial. Además, para potenciar los recursos humanos, Santa Fe cuenta, desde el año pasado, con la primera carrera universitaria dirigida específicamente a este ámbito: la Tecnicatura en Diseño y Programación, que dicta en la modalidad a distancia la Universidad Nacional del Litoral (UNL).
El mercado al que se dirigen las firmas locales desarrolladoras de videojuegos es el de Estados Unidos y Europa, porque el del país, e incluso el de Latinoamérica en general, es muy acotado aunque en expansión. El potencial es sin embargo promisorio a escala global: la de juegos informatizados es la industria más dinámica y la única que mantuvo su crecimiento pese a la crisis internacional. Las posibilidades son infinitas, además, porque al clásico nicho de las computadoras personales se agrega ahora el de los dispositivos móviles, como las tablets y los teléfonos celulares inteligentes. Y Santa Fe está bien posicionada en este campo, resume Rubén Giorgetti, titular de la Secretaría del Sistema de Empresas de Base Tecnológica dependiente del Ministerio de la Producción.
El funcionario explica que la Secretaría que encabeza tiene registrado un total de 17 compañías del rubro, localizadas en las ciudades de Santa Fe, Rosario y Rafaela. Pero no descarta que haya otras que aún no se han acercado a los programas oficiales. Andrés Rossi, gerente de la firma Sismogames de Rafaela –una de las más antiguas y mejor posicionadas de la región y el país– eleva el número de “colegas” santafesinas a más de 20. No todas, sin embargo, están dedicadas exclusivamente a los videojuegos. Según el funcionario provincial, las específicas son 12: el resto son compañías de software que comenzaron a incursionar en el terreno de los juegos digitales.
Talento, formación y capitales
Con jornadas anuales que en septiembre pasado sumaron su cuarta edición, más la tecnicatura que dicta la UNL –única formación pública específica en el país– la provincia apuesta a potenciar el área.
Giorgetti explica que en este negocio, que experimentó un avance inédito ya lejos del legendario Pacman, son tres los factores principales para competir. El primero de ellos está cubierto, y es una masa crítica de gente con talento y creatividad. El segundo, la formación de recursos humanos, lo empezó a encarar la Universidad nacional con sede en la capital santafesina. Y el tercero es el que hay que apuntalar: conseguir capitales para producir un salto de escala industrial, y poder generar los costosos prototipos de juegos con los cuales salir a pelear los exigentes mercados estadounidense y europeo.
Los jugadores de esas regiones son los que marcan la cancha en el rubro. Con todo, Rossi señala que hay espacio para batallar, innovando con “grados de imaginación marginal” posibles dentro de los conceptos y temáticas impuestos por los países centrales. El representante de Sismogames, que además de Rafaela posee oficinas en el Chaco, destaca la “visión” del gobierno provincial sobre el sector, que con el apoyo brindado en muestras, jornadas y capacitación permite el surgimiento de nuevos emprendedores y potencia las posibilidades de crecimiento a los ya instalados.
Desde ingenieros hasta músicos
La industria del videojuego se caracteriza por emprendimientos pequeños o medianos en cuanto a infraestructura y plantel de personal, pero requiere especialistas sólidos en variados rubros: desde dibujantes, diseñadores gráficos, desarrolladores de software, expertos en el área comercial e ingenieros de sistemas hasta músicos y “testers” (personas que prueban los desarrollos para detectar fallas o mejorar su performance).
Rossi destaca que cada vez hay más gente formada en esos aspectos, por lo que se reduce la necesidad de capacitaciones previas. Especialmente en la provincia, destaca, con la carrera a distancia que desde el año pasado ofrece la UNL. Giorgetti añade que muchas de las empresas locales se asociaron con otras de software para aprovechar mutuamente sus competencias, y las más antiguas incluso ya han explorado vínculos con renombradas firmas extranjeras.
Educar desde la pantalla
Otra de las áreas en que aún es incipiente el desarrollo es la educativa. En ese sentido, el Ministerio de la Producción, junto a la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de la UNL, lanzaron este año el primer concurso de producción de videojuegos en la categoría “Videojuego Educativo”, priorizando desarrollos en el tema agua y ambiente (ver aparte).
Rossi, quien además es vicepresidente de la Asociación de Desarrolladores de Videojuegos Argentina (Adva), recalca la voluntad de la gestión provincial para apuntalar esta veta, y aunque señala el potencial dinamizador para la enseñanza que poseen hoy día los videojuegos, explica que deben neutralizarse ciertos prejuicios que existen sobre los mismos en muchos educadores. Giorgetti agrega que este es un espacio poco explorado hasta el momento, pero aclara que hay buena sintonía con el Ministerio de Educación para abordarlo.