Francia jugará de blanco la final del Mundial de rugby contra Nueva Zelanda, el domingo en el Eden Park de Auckland, tras haber decidido, pese a ganar el sorteo, dejar a los All Blacks hacerlo con su tradicional camiseta negra.
El mánager de Francia, Jo Maso, había dejado entender hace varios días que su equipo tomaría esta decisión si ganaba el sorteo, que tuvo lugar el lunes en la sesión plenaria de la Asamblea General de la International Board (IRB, órgano supremo del rugby).
Citado en un comunicado de la Federación Francesa de Rugby, Jo Maso, justificó esta elección por «la calidad de la acogida del pueblo neozelandés, la organización sin fallos de esta competición, el honor y el placer que hace jugar la final de la Copa del Mundo de rugby de 2011 en el estadio mítico de Eden Park».
En 2007, antes del partido de cuartos de final ganado (20-18) por los franceses en Cardiff, la elección del color de las camisetas se había convertido en un culebrón entre las dos naciones.
El XV de Francia, que había ganado el sorteo, deseaba jugar de azul, su color tradicional. Pero la camiseta de los Bleus en aquella época era azul oscuro -bastante cercano al actual-, y esa decisión había impedido a los All Blacks, vestidos por una marca deportiva rival de la de los galos, hacerlo de negro. Los neozelandeses habían finalmente utilizado su segunda equipación, de color gris.
Francia y Nueva Zelanda se enfrentan el domingo (08h00 GMT) en el Eden Park de Auckland en la final del Mundial 2011.
