La prensa neozelandesa del lunes no concede ninguna posibilidad a Francia de derrotar a los All Blacks en la final de la Copa del Mundo de rugby, el domingo en el Eden Park de Auckland.
«Finalmente», titula en primera página el New Zealand Herald, el principal diario del país, para saludar la calificación del equipo de Graham Henry para la final. «Los All Blacks van a encontrar a una selección francesa llena de defectos el domingo en la final, lo que constituye una oportunidad de terminar con el pasado y levantar la copa tras 24 años de espera», escribe el diario, bajo una foto del centro Maa Nonu, marcando el único try de los All Blacks en semifinales frente a Australia (20-6) el domingo.
«Los franceses: olvídense de la calidad», titula el diario en sus páginas de deportes, recordando el triunfo galo frente a Gales (9-8), el sábado en semifinales.
El antiguo apertura de los All Blacks, Andrew Mehrtens, señala que «el equipo de Francia, sin línea directora, parece incapaz de ganar la copa».
El comentarista Peter Bills estima que el XV de Francia, frente a Gales, «traicionó la herencia del rugby francés en su conjunto», destacando que su actuación, en superioridad numérica de 15 contra 14 durante más de una hora, fue «patética, débil».
El otro gran diario neozelandés, The Dominion Post, parece también considerar que la Copa William-Webb Ellis está ya entre las manos del capitán de los All Blacks, Richie McCaw. Este diario titula en la primera página del cuadernillo de deportes: «Francia no tiene ninguna posibilidad de ganar la Copa del Mundo», con una foto del apertura Morgan Parra.
«Es nuestra hora», señala el diario en páginas interiores, al lado de otro título: «Tenemos una mano en la Copa Webb-Ellis».
El exinternacional inglés Stuart Barnes habla también de «un equipo francés sin alegría, que traicionó su pasado». «Limitado, este equipo de Francia al que no se puede querer, alcanzó la final del Mundial, ¿y después?», se interroga. «No merecen estar ahí. Esperemos que pierdan la final, en nombre del rugby actual y del futuro a largo plazo del rugby francés».