La líder y candidata a presidenta de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, reconoció que su fuerza hizo «la peor elección» en la historia, al punto que los primeros datos oficiales la ubicaban última entre los siete aspirantes a la primera magistratura.
La diputada nacional sostuvo que la CC repitió el magro resultado de las primarias del pasado 14 de agosto, cuando obtuvo un 3,22 por ciento, aunque según los datos del escrutinio se llevaba apenas 1,8 puntos.
«Hemos repetido creo la peor elección de nuestra historia junto con las primarias», subrayó Carrió al iniciar su discurso en el búnker de su espacio, en Rivadavia al 1400 de esta Capital.
La diputada nacional dijo que ellos no serán «responsables de lo que viene porque lo advertimos». En esa línea fue cuando sostuvo que «la Presidente y el 53% de la población que la votó son responsables de lo que vendrá».
La marca es llamativa teniendo en cuenta que en 2003 como candidata del ARI sacó el 14,05 por ciento de los votos mientras que hace cuatro años fue la segunda más votada por la Coalición Cívica con el 23,04 por ciento.
Junto a su compañero de fórmula, Adrián Pérez, dijo que la Coalición Cívica «ya no lidera la oposición» y admitió que ahora ese espacio lo ocupará Hermes Binner, el candidato presidencial del Frente Amplio Progresista (FAP).
«Iniciamos casi un período de resistencia. Resistir, ha signado mi vida. No crea el pueblo, la gente que no ha votado a Cristina que estamos mal, que estamos deprimidos. Simplemente hemos cambiado el rol. La oposición la liderará ahora Hermes Binner y podrá ser juzgado por ese liderazgo», enfatizó la legisladora, que se ubicaba última detrás del candidato del Frente de Izquierda, Jorge Altamira.
Carrió llegó a su búnker, instalado en el Instituto Hannah Arendt, pasadas las 20.00 y rápidamente se ubicó para dar el discurso, antes de que se conocieron los primeros datos oficiales.
«Reconocemos la elección de Cristina Kirchner y de los otros candidatos», dijo la por tercera vez candidata presidencial.
Vestida de negro, pero con una chalina color naranja en el cuello, Carrió se esforzó en remarcar que no estaba «deprimida» por el escaso resultado electoral.
«Si fue votada Cristina, por algo será», dijo la chaqueña y fiel a su estilo discursivo resaltó: «Dios sabe por qué hace las cosas. Si yo hubiera sido Presidenta nunca me hubiera gustado tener tanto poder sin oposición aparente. No hay veneno más peligroso que el poder».
Al responder preguntas de la prensa, Carrió habló también de su futuro político y afir
mó: «Yo he estado sola muchas veces en el Parlamento, tengo dos años más por delante. Algunos dicen que me corrí a la derecha, pero cuándo estuve en la izquierda», se preguntó.
A la vez, dijo que en el bloque de diputados nacionales de la Coalición Cívica quedarán al menos «seis integrantes» a partir del próximo 10 de diciembre.
En esa cuenta, la líder de la CC no incluyó a la diputada Patricia Bullrich, en momentos en que la relación entre ambas pende de un hilo.
«Ahora el PJ, por primera vez desde 1945, va a tener que hacerse cargo de la historia. Lo tengo muy claro, esto le va a hacer bien a la oposición de cara al futuro», dijo Carrió.
«Millones de argentinos, pese a todo lo que vieron en materia de corrupción, le dieron el apoyo, pero yo no estoy enojada con ellos, lo entiendo», aseguró la dirigente opositora.
La jefa de la CC se molestó ante una pregunta sobre si no le parecía «una lástima» que diputados como Pérez y el candidato a gobernador provincial Juan Carlos Morán se quedaran fuera del Congreso por no haberse presentado.
«Los verdaderos hombres de bien se ven cuando no tienen cargo, y aparte se evitan de verle la cara a (Carlos) Kunkel, que debe ser algo muy lindo», dijo Carrió, ofuscada.
Antes de cerrar su presentación, agregó: «La historia no se juega en una coyuntura. Yo estoy espléndida, no tengo ni una arruga, eso sí, estoy cada día más gorda, pero siempre voy a seguir luchando contra la corrupción, no crean que estoy deprimida, ni mucho menos».