Intendentes de la Unión Cívica Radical (UCR), comandados por quienes triunfaron en las últimas elecciones, se reunirán hoy en la localidad cordobesa de Tanti para debatir las propuestas que llevarán al seno de la Convención Nacional y ante el Plenario Constitutivo de Delegados, en el que se elegirá al reemplazante del actual titular partidario, Ernesto Sanz. El santafesino Mario Barletta y el cordobés Ramón Mestre aparecen con chances de suceder al senador nacional por Mendoza, quien avisó después de las elecciones del 23 de octubre que no buscará un nuevo mandato al frente del centenario partido.
El anfitrión del encuentro será el intendente electo de la ciudad de Córdoba, –actual senador nacional– Ramón Mestre. El encuentro –que se realizará desde el mediodía en la localidad de Tanti, en el departamento Punilla, a unos 51 kilómetros de la capital mediterránea– será sin acceso para la prensa; alrededor de las 16 se dará a conocer un documento sobre las conclusiones de la reunión.
Entre los intendentes que participarán están los mendocinos Víctor Fayad y Alfredo Cornejo; el santafesino Mario Barletta y su sucesor electo José Corral; y los bonaerenses Gustavo Posse, Mario Meoni y Héctor Gutiérrez, entre otros. La UCR realizará su convención nacional partidaria en Vicente López, Buenos Aires, los días 18 y 19 de noviembre, en tanto que el plenario de delegados para resolver la sucesión de Sanz fue convocado para el mediodía del 16 de diciembre, en la sede partidaria de Alsina 1786, en la ciudad de Buenos Aires.
Autocrítica y renovación
Postulado por sus propios pares para suceder a Sanz, el santafesino Barletta –ex candidato a gobernador en la interna del Frente Progresista, en la que fue derrotado por el socialista Antonio Bonfatti– reclamó una “profunda” autocrítica a sus correligionarios: “El radicalismo tiene dificultades serias y no sólo por el resultado de las últimas elecciones. Aquí hay que hacer un análisis mucho más profundo: la UCR es un partido que nace para organizarse en defensa de los derechos civiles de los ciudadanos, ése fue el hecho fundante. Y hace mucho tiempo que el radicalismo sólo se reúne para definir candidaturas, tanto a cargos partidarios como cargos nacionales electivos, por lo tanto tiene que hacer una profunda autocrítica, tiene que modernizarse”.
Barletta le contestó a los dirigentes que –como el bonaerense Federico Storani– salieron a pedir las cabezas de las autoridades de la UCR luego del tercer puesto logrado por el candidato a presidente Ricardo Alfonsín: “Renovarse no significa dar pasos al costado: hoy se necesita de todos los radicales. Habrán existido equivocaciones, no pocas, y algunos esfuerzos, pero me parece que en este tiempo tiene que existir cierto consenso, diálogo y encuentros, y un cambio profundo de la cultura de este partido que está llamado a ser un actor mucho más importante. Cuando hablamos del cambio de cultura decimos que los partidos políticos están para ocuparse de los problemas del país, para acompañar lo que haya que acompañar”.
¿Currículum o gestión?
Barletta valoró el espacio que comenzaron a diseñar los intendentes radicales y opinó que es una ventaja que sean los mandatarios locales quienes se hayan puesto al hombro la reorganización del partido, puesto que son quienes más cercanía tienen con la sociedad: “A nivel provincial y nacional, el radicalismo no termina de entender cuál es su verdadero rol, cosa que sucede distinto en los niveles locales, donde la cercanía con la gente y los criterios de selección están más asociados con el vecino. Ése es el desafío y por eso también me parece importante que los intendentes hagan oír su voz, que los intendentes que son quienes tienen la experiencia de esa proximidad con las demandas de la sociedad planteen esta necesidad de recambio en el ámbito del partido”.
El intendente santafesino agradeció a sus pares por haberlo ungido como candidato a presidir el partido: “Desde el punto de vista de lo que está significando Santa Fe para el país, me halaga que me convoquen. No piensan en Barletta por su currículum sino porque ha habido una gestión en la ciudad que trascendió mucho más de lo que imaginábamos, y eso es un orgullo para los santafesinos. Pero yo no soy delegado; la Carta Orgánica determina que el Comité Nacional entre sus delegados elige presidente, vicepresidente y demás; yo no voy a forzar ningún aspecto”.