La alarma del Banco Nación de Villa Gobernador Gálvez sorprendió en plena madrugada de ayer ala Policía, que dispuso un operativo para prevenir lo que, suponían, podía ser un robo de gran magnitud. Sin embargo, en vez de un grupo comando armado hasta los dientes, cuando llegaron vieron a un niño de 12 años que deambulaba por la sucursal bancaria y revisaba cajones en busca de algún botín: quedó a disposición dela Dirección Provincialde Promoción de los Derechos de Niñez, Adolescencia y Familia, desde donde dispusieron que el chico, que vivía con su abuela, quedara a cargo de su madre.
Ayer a las 4, la alarma de la sucursal del Banco Nación de Bomberos Voluntarios y Mitre de Villa Gobernador Gálvez –que se enciene mediante un sensor de movimiento– se activó. La central de Policía recibió el aviso: había alguien adentro. De acuerdo con los investigadores, se montó un operativo en el perímetro ya que, en la suposición de los uniformados, podía tratarse de una banda armada intentando robar la institución bancaria.
Según los pesquisas, al llegar a la sucursalla Policíadebió aguardar en la puerta hasta que el encargado del banco llegara y les habilitara el ingreso al inmueble. Sin embargo, al asomarse para tener una idea de con qué iban a encontrarse al entrar, no vieron una banda organizada, sino a un niño que, después se enterarían, no llevaba brutales armamentos sino tan sólo un destornillador.
Al notar quela Policíaestaba afuera, el chico, de 12 años, se escondió. Más tarde, cuando ingresaron a la institución bancaria, los policías lo encontraron oculto bajo la campana de un parrillero en un patio interno.
De acuerdo con los investigadores, el chico había entrado al banco por ese mismo patio. Según las fuentes, el niño trepó al techo y se descolgó al patio, no sin antes separar un poquito las rejas colocadas a modo de techo que le impedían descolgarse libremente. Luego, sólo palanqueó una puerta y ganó el interior de la sucursal, tras lo cual se puso a revisar cajones en busca de algún botín.
Los voceros explicaron que el niño vive desde hace un tiempo con su abuela, en Villa Gobernador Gálvez, ya que su padre se encuentra preso en la cárcel de Piñero y su madre se mudó a la localidad de Alvear. “El chico se volvió inmanejable para la abuela. Se niega a ir a la escuela y hace lo que quiere”, explicó un pesquisa.
De acuerdo con los investigadores, tras ser atrapado dentro del banco, el chico fue puesto a disposición dela Dirección Provincialde Promoción de los Derechos de Niñez, Adolescencia y Familia, desde donde determinaron que el menor quedara al cuidado de su madre, bajo la promesa de que se reinsertara a la escuela.