Una derrota más le bastó a la dirigencia de San Lorenzo para acordar, de común acuerdo, la rescisión de contrato con Omar Asad. Unión dio la sorpresa en el Nuevo Gasómetro y la afición ya no soportó otra derrota.
En zona de Promoción y con el temor tras el duro desenlace que tuvo River la temporada pasada, el presidente Carlos Abdo, avalado por la Comisión Directiva, decidieron aceptar la renuncia que presentó el entrenador, hecho que se haría oficial esta tarde.
El derechazo de Paulo Rosales fue el fin de ciclo para Asad, que vio como el ascendido Unión sacudió su último crédito como director técnico de San Lorenzo. Como local, el elenco azulgrana no pudo ante el, ahora, rival directo por mantener la categoría.
Sumado a la polémica que se generó hace semanas por el ingreso de la barra brava a un entrenamiento para hablar con los jugadores, conversación que culminó en un golpe hacia Jonathan Bottinelli y una disputa que acabó incluyendo a Pablo Migliore y Emmanuel Gigliotti, el plantel pareció rebelarse a Asad y el entrenador acabó por perder la calma en el vestuario.
Los nombres que se acercan
Ricardo Caruso Lombardi y Américo Rubén Gallego son las dos primeras opciones para San Lorenzo, que ya no puede fallar en el hombre que sitúe en su banco de suplentes.
El primero, actualmente en Quilmes, ya fue sondeado para hacerse cargo del equipo, aunque la desvinculación del club que milita en la B Nacional ronda los 400 mil dólares y eso es un factor en contra para su contratación.
En tanto, el “Tolo”, de última experiencia en Chile, precisamente en Colo Colo, estaría dispuesto a negociar con el “Cuervo”, que sería su cuarto club en Argentina tras haber conducido técnicamente a River, Independiente y Newell’s.