Estudiantes-Banfield fue suspendido a los 13 minutos del primer tiempo por falta de garantías, luego de que un grupo arrojara una bomba de estruendo que le produjo un shock acústico al arquero de Banfield, Cristian Lucchetti.
«Los grupos que no tenían permitido entrar se infiltraron seguramente con la intención de generar lo que generaron», explicó la máxima autoridad del «Pincha» a través de la página oficial del club.
Lombardi agregó además que la entidad aplica «el derecho de admisión» para no dejar ingresar a los «barrabravas» y que eso puede tener un precio.
«Tenemos un derecho de admisión. Sacarlo y darles entradas sería fácil. No lo hacemos nosotros, el resto tal vez sí. Todos tenemos que pagar un precio menor para erradicar la violencia», argumentó Lombardi.
Tanto para Lombardi como para los jugadores, todo «estuvo preparado», en tanto que se habló de un operativo de seguridad que falló ya que por ejemplo, no hubo cacheos ni revisaron los ómnibus.
«Esto no es responsabilidad del club. La lucha debe ser con la AFA y las fuerzas de Seguridad y Justicia con el fin de erradicar esto», subrayó Lombardi.