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Golpes en la designación del presidente del radicalismo

Dos sectores de la Juventud Radical se cruzaron a golpes. A uno de los grupos se le negó el ingreso por falta de espacio y pretendieron hacerse paso a golpes de puño y palos. En tanto, Alfonsín aseguró que "hay consenso" para designar al dirigente santafesino Barletta.

Minutos después del ingreso del diputado Ricardo Alfonsín, el Comité Nacional de la calle Alsina fue escenario de enfrentamientos a golpes entre dos facciones de la militancia juvenil que llegaron para presenciar la elección de autoridades partidarias.

El choque se produjo en el salón de actos del edificio del centro porteño entre militantes de La Cantera Popular y la alfonsinista Red Federal, sectores que pertenecen a la Juventud Radical pero mantienen diferencias políticas dentro del partido.

A uno de estos grupos se les negó el ingreso por la gran cantidad de público presente y pretendieron entrar a la fuerza con golpes de puño y de los palos que sostenían las banderas.

Luego de unos minutos, se produjo una tensa calma y se comenzó a negociar la entrada de un grupo de militantes en representación de las facciones para presenciar la elección.

En tanto, el diputado aseguró que el santafesino Mario Barletta reúne «el consenso» para convertirse en nuevo presidente del partido y señaló que la mesa de conducción que lo acompañará «va a estar integrada de manera muy amplia».

«Barletta es un muy importante dirigente de Santa Fe, con un prestigio que ha trascendido la Capital. Es un hombre que tiene vocación de diálogo y consenso importante en la UCR, acredita compromiso con las ideas del partido y tiene excelente relación con todos los sectores», señaló Alfonsín.

El ex candidato presidencial se expresó así al ser consultado al ingresar a la sede del Comité Nacional junto al senador Gerardo Morales y el chaqueño Angel Rozas para participar del plenario de delegados que elegirá las próximas autoridades del partido.

Mientras en la planta baja de la casa radical se acreditaban los delegados, en el primer piso se desarrollaba una reunión a puertas cerradas entre los máximos dirigentes del partido para negociar una lista de unidad.

El ex vicepresidente Julio Cobos también se hizo presente en la sede del Comité Nacional de la UCR y manifestó su respaldo al santafesino para que se convierta en el próximo presidente del partido.

«Barletta es un hombre de experiencia, expresa una renovación. Ha presidido una universidad y gobernado una intendencia importante. Lo que necesita el radicalismo es una persona de gestión democrática», sostuvo Cobos al ingresar al plenario de dirigentes que eligen las nuevas autoridades.

Los 95 delegados nacionales en condiciones de votar se reunirán en la sede del Comité Nacional de la calle Alsina al 1700, y todo indica que el exintendente de Santa Fe, Mario Barletta, será quien resulte designado para conducir el partido por los próximos dos años.

Barletta se erigiría como el candidato de «consenso», mientras el alfonsinismo intenta imponer los nombres de Ángel Rozas y del bonaerense Juan Manuel Casella para ocupar la primera vicepresidencia y la secretaría general del radicalismo, respectivamente.

Sin embargo, Ámbito Financiero reveló que el sector que rechaza a Barletta como «longa manu» de las gestiones de Gerardo Morales y Ernesto Sanz en el Comité Nacional apoya la candidatura de la exdiputada Sandra Rioboó, quien fue expulsada del partido por integrar las listas del Frente Amplio Progresista en las últimas elecciones nacionales. Rioboó cosechó el apoyo de Julio Cobos y del vicegobernador de Santa Fe, Jorge Henn.

Rioboó, que fue notificada por carta documento sobre su expulsión y le advirtieron que no le permitirán ingresar al plenario de delegados, intentará de todos modos participar del debate custodiada por Cobos y Henn.

Con el camino allanado, Barletta sólo debe sortear una complicación legal. Sus compañeros de la UCR de Santa Fe le objetan haber sido electo delegado hace pocos días violando normas legales, por lo que hay cinco amparos que objetan su candidatura. El principal detractor de la designación de Barletta es el bonaerense Leopoldo Moreau.

Anoche, representantes de los diferentes sectores internos de la UCR negociaban contrarreloj por los demás cargos de la mesa de conducción del Comité Nacional. En el plenario, los radicales elegirán además de al sucesor de Sanz, a quienes ocuparán las tres vicepresidencias, las 24 secretarías y los cargos destinados a la juventud, Franja Morada y a la Organización de Trabajadores Radicales (OTR).

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