A una semana de los incidentes enla Legislaturade Santa Cruz por el rechazo a la reforma previsional que pretendía encarar el gobernador Daniel Peralta, que derivaron en la renuncia de funcionarios y diputados deLa Cámporay una fuerte crisis política provincial, el gobernador presentó ayer un paquete de medidas para reducir el gasto público –por ahora sin reformar el sistema de jubilaciones– y le tomó juramento a los nuevos ministros del gabinete.
En su discurso, Peralta hizo mención a la reforma jubilatoria, cuyo debate quedó pospuesto para marzo, y pidió realizar un esfuerzo de «arriba para abajo: los que más tienen primero y luego los que menos tienen, porque esta Caja es inviable». Se refirió así ala Cajade Previsión Social de la provincia, aunque afirmó que las modificaciones que impulsa en el régimen jubilatorio se harán «con inteligencia», al tiempo que dijo estar convencido de que «muchos comprenderán la situación y se encontrará una salida».
Precisamente, el tratamiento de la controvertida reforma del sistema previsional enla Legislaturageneró la semana pasada la renuncia de parte del gabinete y el desmembramiento del bloque oficialista, tras una represión policial en la movilización de sindicatos y organizaciones sociales.
En relación a la retracción de los gastos del Estado provincial, Peralta dijo: “El esfuerzo requerido no excluirá a la banca, empresas mineras, petroleras y casinos; no son tiempos fáciles, ni nada dice que será muy bonito lo que viene».
Entre las medidas adoptadas figura la suspensión de la «designación de personal contratado y en planta transitoria» y «las contrataciones de locación de obra de personal en cualquiera de sus formas o modalidades».
Además, se estableció que «toda adquisición de bienes de capital y contratación de servicios que signifiquen compromisos de fondos del Tesoro provincial y de los recursos específicos administrados por los organismos, deberán ser autorizados» por el Ejecutivo provincial.
«Visto que no pudimos tratar el proyecto de ley que fue enviado ala Legislaturael día 29 de diciembre por los hechos que son de público conocimiento, lo que hicimos fue extractar aquellos aspectos que consideramos importantes, porque es imprescindible el reordenamiento de cuentas del Estado provincial», justificó Peralta.
Además, hizo referencia al corte de servicios por parte de farmacias y médicos ala Cajade Servicios Sociales y advirtió: «Nosotros, bajo la modalidad de corte y extorsión, no dialogamos y no pagamos. Vamos a pagar cuando se garantice salud para los santacruceños».
El texto del decreto no tiene en cuenta el tema salarios ni tampoco la polémica por la modificación del sistema previsional, cuya discusión fue postergada para marzo tras un acuerdo entre el gobierno, legisladores y gremios.
En cuanto al gabinete, finalmente asumieron Elsa Capuchinelli, en el Ministerio de Desarrollo Social; Claudio Pesse, como ministro secretario general dela Gobernación, y el hasta ayer subsecretario Héctor Rafael Gilmartin como secretario dela Producción.
Capucchinelli es una ex dirigente de los judiciales y fue candidata a intendenta de Río Gallegos, mientras que Pesse fue responsable del área informática durante la gestión de Néstor Kirchner como gobernador; a la vez que Gilmartin –cercano al ministro de Planificación Federal Julio de Vido– era subsecretario de Producción.
La ceremonia, que había sido postergada por la operación de la presidenta Cristina Kirchner, se produjo luego de que Peralta decidiera avanzar con el recorte de gastos en la provincia con la firma de un decreto de necesidad y urgencia, que no incluyó la reforma previsional.
