Primer ensayo, pocos cambios a la vista. Newell’s igualó sin goles ante Tigre en el estreno futbolístico de la pretemporada donde todavía no se pudo ver la mano del Tata Martino en un equipo que tuvo en cancha a los mismos jugadores que tuvieron un pésimo 2011.
Fue un típico cotejo de pretemporada. Poco fútbol, mucha imprecisión y escasas chances de gol. Nada nuevo para la Lepra que arrancó con ímpetu, pero se fue desdibujando y terminó arrinconado por Tigre.
El elenco rojinegro evidenció las mismas virtudes y defectos del año anterior. La defensa se mostró bastante firme, más allá de algún descuido lógico producto del cansancio del primer partido de pretemporada. En el mediocampo se notó una idea de manejar con criterio la pelota, aunque en la segunda parte mermó el físico y el rival lo empujó contra el arco de Nahuel Guzmán, quien ingresó en la segunda parte por Peratta. Y adelante siguieron los problemas para generar chances del gol y sobre todo para definir.
Fue bueno el trabajo de Mauricio Sperduti, quien con el Tata Martino parece haber recobrado el ímpetu de otros años y por momentos fue aquel jugador que pintaba para ser transferido a Europa.
Martino prefiere no hablar de dibujo táctico, aunque la primera muestra dejó en claro que abajo apuesta a línea de cuatro, con Leonel Vangioni como lateral izquierdo. En el medio Mateo y Bernardi formaron el doble cinco, mientras que Víctor Figueroa fue el enganche, con Sperduti por derecha y Martín Tonso por izquierda. Mientras que Maxi Urruti arrancó como centrodelantero, en principio un pasito adelante de Víctor Aquino, quien ingresó en la segunda parte.
Justamente Urruti tuvo una chance inmejorable en el inicio, donde Javier García le ganó en el mano a mano. Después hubo algunas insinuaciones producto de desbordes de Mauricio Sperduti, pero que no encontraron un buen receptor en el área.
Poco cambió en la segunda parte con el ingreso de Aquino. El paraguayo tuvo poco contacto con la pelota y su presencia pasó inadvertida.
En la segunda parte el cansancio y los cambios permitieron que Tigre se adueñara del juego y estuvo muy cerca de quedarse con la victoria. Un disparo de Ramiro Leone en el palo, un cabezazo del Chino Luna que se fue muy cerca, y un dominio absoluto del balón del Matador dejaron una imagen final de la Lepra muy desdibujada, aunque algunos indicios de la primera parte dejaron abierto el crédito a lo que pueda lograr el Tata con un plantel donde por ahora no se reforzó y poco cambió.