La actividad económica nacional mantuvo buen ritmo a lo largo de 2011, al registrar un crecimiento del 8,8 por ciento, alentada por el consumo, el comercio internacional y la industria, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). Este resultado se obtuvo luego de que el estimador mensual de la actividad económica (Emae) mostrara en diciembre signos de desaceleración, con un alza interanual del 5,5 por ciento y una baja del 0,2 por ciento respecto de noviembre.
El año pasado mostró una suba sostenida del consumo interno, que se reflejó en un alza del 27,7 por ciento en las ventas de los supermercados, variación que incluye un avance del 9,2 por ciento en la medición de precios implícitos, según el organismo oficial. Incluso, las ventas en los grandes centros de compra aumentaron durante el año pasado un 31,2 por ciento, pero con una variación en los precios del 10,2.
En segundo lugar, el sector industrial presentó un desempeño con alzas y arrojó una mejora de 6,5 por ciento en 2011. El sector metalmecánico, excluido el automotriz, lideró los avances del año con el 13,6 por ciento, mientras que la fabricación de autos mostró un alza del 13,1 por ciento, seguida por la elaboración de cemento con el 11,7 por ciento, siempre según los datos del Indec.
Por sobre el promedio de aumento del 6,5 por ciento también estuvieron la producción de acero crudo con el 7,4; la elaboración de materiales para la producción, 9,8; productos farmacéuticos 10,1; entre otros sectores. Sin embargo, otros rubros mostraron comportamientos diversos. Así, la refinación de petróleo cayó 4 por ciento en el año, el procesamiento en frigoríficos de carnes rojas el 6,8 por ciento; elaboración de fibras sintéticas y artificiales 2,2; cigarrillos 1,7.
En tanto, la balanza comercial cerró el 2011 con un superávit de 10.347 millones de dólares, un 11 por ciento por debajo de lo registrado en 2010, producto de exportaciones que crecieron el 24 por ciento a 84.269 millones, contra importaciones que avanzaron un 31 por ciento para sumar 73.922 millones.
Con todos estos datos, el gobierno nacional estima que la economía crecerá durante este año un 5 por ciento, cifra cercana al 4,8 que estimó recientemente la Comisión Económica para América latina y el Caribe (Cepal), organismo que pronosticó un crecimiento del 9 por ciento para 2011.
Las cifras del Indec difieren con las proyecciones de las consultoras privadas. Al respecto, para el Centro de Estudios Económicos de Orlando Ferreres, la economía argentina cerró el 2011 con un crecimiento promedio del 5,7 por ciento, inferior al 8 por ciento del año previo. Para Ferreres, en esta desaceleración tuvo un papel fundamental la actividad industrial, que presentó en el último mes su primera baja interanual desde 2009 (1,3 por ciento anual), acumulando en 2011 una suba de sólo 4,8 por ciento, impulsada fundamentalmente por el sector automotriz.
Para este año, el gobierno estimó en el presupuesto un crecimiento económico del 5,1 por ciento; una variación de precios del 9,2 por ciento y una cotización del dólar de 4,40 pesos como promedio anual. Además, contempla un aumento del gasto público de 18,8 por ciento; inversiones un 17,9 superiores a 2011; un alza de los recursos de 22,5; y un superávit fiscal de 2,2 del Producto Bruto Interno.