El tenista cordobés David Nalbandian parte como favorito sentimental del público argentino, aunque encontrará rivales de fuste en el español David Ferrer o el francés Gilles Simon, en la duodécima edición del ATP de Buenos Aires, a jugarse desde mañana en el Lawn Tennis Club, en Palermo.
El certamen, que forma parte de la gira latinoamericana sobre polvo de ladrillo, repartirá premios por 484.100 dólares y contará con varios tenistas de jerarquía, como el defensor del título, el español Nicolás Almagro, el suizo Stanislas Wawrinka o el ascendente japonés Kei Nishikori.
También estará un exnúmero uno del mundo como Juan Carlos Ferrero y se despedirá del público sudamericano el chileno Fernando González, quien anunció hace 15 días que se retirará de la actividad en marzo próximo, luego de concluir su participación en el Masters 1000 de Miami.
Nalbandian, relegado al puesto 84 del ranking mundial de la ATP y campeón en Buenos Aires en 2008, debutará posiblemente el martes ante un tenista surgido de la clasificación y en el caso de avanzar a octavos de final, se encontrará con el tandilense Juan Mónaco (22º) o el italiano Filippo Volandri (69º).
Mónaco, quien suele ser acompañado por una gran cantidad de público cada vez que juega en el país, fue campeón en 2007 y buscará confirmar lo bueno que mostró hace una semana en la serie de Copa Davis que la Argentina le ganó a Alemania por 4-1 en Bamberg.
El valenciano Ferrer (5º), finalista en Buenos Aires en 2010, llega como líder de la «Armada Española» que se quedó con las tres últimas ediciones del torneo, tras los títulos de Tommy Robredo en 2009, Ferrero en 2010 y el mencionado de Almagro el año pasado.
Ferrer debutará ante un tenista surgido de la «qualy» y en octavos iría contra el correntino Leo Mayer (80º) o el rosarino Facundo Bagnis (162º), sin dudas un cuadro despejado para un tenista que se encuentra en la plenitud de su carrera con 12 títulos en su haber y campeón de la Davis a fines del año pasado.
Simon (12º), por su parte, debutará frente al portugués Rui Machado (78º) y de ganar le tocará el argentino Carlos Berlocq (42º) o el español Pere Riba (90º), mientras que el suizo Wawrinka (26º) se medirá con el marplatense Horacio Zeballos (113º) y en segunda ronda iría contra el francés Benoit Paire (98º) o un adversario de la «qualy».
El francés decidió experimentar en Sudamérica y jugó el ATP de San Pablo (perdió con Nalbandian en octavos de final), mientras que el suizo participará del torneo por segundo año consecutivo, ya que en 2011 fue semifinalista, al caer con Juan Ignacio Chela.
Sin dudas, el «Flaco» Chela merece una mención especial, ya que es el único tenista que jugó las 11 ediciones anteriores y estará una vez más en carrera a sus 32 años.
Chela (28º) enfrentará en la ronda inicial al español Albert Ramos (64º) y de pasarlo irá contra González (266º) o el catalán Albert Montañés (51º).
El exótico japonés Nishikori (18º), quien es seguido por una buena cantidad de público cada vez que practica en una de las canchas auxiliares del complejo palermitano, debutará ante Ferrero (43º) y el ganador irá contra el rumano Víctor Hanescu (93º) o el español Pablo Andújar (48º).
El campeón Almagro (11º) se medirá en el inicio con un habitué de Buenos Aires como el italiano Potito Starace (76º) y de pasarlo se encontrará con el zurdo brasileño Thomaz Bellucci (38º) o el lusitano Federico Gil (87º), mientras que otro integrante de la «armada española» y también campeón de la Davis, Fernando Verdasco (27º), regresará al torneo, después de ocho años.
Verdasco jugó en Buenos Aires en 2004 cuando tenía 21 años y perdió en la ronda inicial con otro juvenil que prometía, el francés Richard Gasquet. En esta edición volverá ante el también galo Eric Prodon (103º) y en un eventual acceso a octavos de final le tocará el esloveno Blaz Kavcic (110º) o un rival de la «qualy».
Los argentinos no son esta ocasión los grandes favoritos, como sucedía en años anteriores, cuando la «Legión» brillaba a pleno, con el «Gato» Gastón Gaudio, el «Mago» Guillermo Coria, u otros que arrimaban como el «Gordo» Agustín Calleri o Guillermo Cañas, todos retirados del tenis.
Encima, Nalbandian y Mónaco podrían cruzarse enseguida, en los octavos de final, todo un cóctel como para presumir una nueva coronación de un español, aunque eso no impedirá disfrutar una semana de tenis del mejor nivel, algo que durante muchos años se extrañó, y que desde 2001 se convirtió en una costumbre, con el ATP instalado en el país.