La tenencia responsable y sanidad de perros y gatos fue firmada bajo el Decreto de Necesidad y Urgencia 1.088/11 y hace eje en el tratamiento de las mascotas para evitar la transición de enfermedades zoonóticas y por la esterilización quirúrgica gratuita, en ambos sexos, como control de población. Eso hace desde hace 15 años, en 1997, por ordenanza del Concejo, el Instituto Municipal de Salud Animal (Imusa). Ubicado en avenida Francia 1940, está abierto de lunes a viernes, de 8 a 18, y promueve la adopción de mascotas. En una semana, se adoptan un promedio de 15 cachorros y alrededor de 6 adultos. Cabe resaltar que para asumir la adopción se debe firmar una declaración jurada de “tenedor responsable” donde la persona se hace cargo de los daños materiales y físicos del animal, no lo puede abandonar y donde la Municipalidad queda desligada de cualquier inconveniente que pueda ocurrir con la mascota.
El Imusa tiene tres líneas de trabajo: la esterilización, que es la madre de todas, la vacunación antirrábica y la desparasitación, lo cual previene que un animal transmita a las personas rabia, leptospirosis, parásitos; y fundamentalmente es un centro de esterilización donde operan a 30 perros por día.
“Tenemos 150 perros adultos para ubicar, si vienen más animales, malogramos la salud del que ya está y además le quitamos lugar al accidentado, que es el producto de una tenencia irresponsable. La gente cree que cuando la perra tiene cría es algo romántico y lindo, pero no entiende que hay cinco vidas que dependen de esos dueños. Además, tenemos un anexo que estamos en vía de cerrarlo, porque es un lugar que se deterioró y hay 150 perros más, es decir que tenemos alrededor de 300”, detalló Diana Bonifacio, directora del Imusa.
El Instituto está haciendo “campañas de adopción”, junto con protectoras de animales y ONG’s, en la plaza San Martín, Córdoba y Dorrego, los viernes de 9 a 13 y en la Feria Retro de bulevar Oroño y Wheelwright, domingos de por medio, por las tardes.
Bonifacio asegura que es importante empezar a regular la venta de animales en cuanto a la parte sanitaria y la cantidad que se venden. “Las patentes de taxis y remises están reguladas, pero nadie dice que en Rosario no se puede vender más de 10 mil perros por año y no hay un control sobre eso. Estamos haciendo un registro de criadores, necesitamos gente que vaya a los lugares de venta y que sea una actividad comercial, tienen que facturar, pagar impuestos. Eso se hace a través de Inspección, con actividad comercial, con registro”, detalló la directora.
“Hace unos años atrás había menos perros de raza, con lo cual el mestizo era un perro más adoptable, el perro de raza desplazó al cuzco, entonces la gente por una cuestión de status adquiere ese tipo de animales y no viene a adoptar al Imusa o no recoge al callejero”, afirmó Bonifacio.
Bonifacio afirma que si hubiera 50 personas en la ciudad que decidieran reproducir responsablemente, se terminaría su trabajo. “Una perra se reproduce geométricamente, por ejemplo, castramos 20 perras pero hay 150 nacimientos, la mayoría de la gente ama a los perros y si son esterilizados, habría menos en la calle”, aseguró la médica veterinaria. Al Imusa llegan todo tipo de animales: de raza, mordedores, hay muchas personas que se van a vivir al exterior y no saben qué hacer con su mascota y lo llevan al instituto. “La adopción es el último paso de una cadena desdichada, si hay adopción es porque antes hubo un abandonado, un tenedor irresponsable o una perra con una cría no deseada”, concluyó Bonifacio.
