Más de 1500 personas fueron evacuadas, 8.500 familias afectadas y 2 millones de hectáreas inundadas, debido a las lluvias que azotan a la región del Chaco central y por la crecida del río Pilcomayo, en Paraguay.
La zona de General Díaz, así como también las comunidades indígenas de Cacique Zapo, son las más afectadas y los evacuados fueron llevados a un albergue instalado por la Secretaría de Emergencia Nacional, según despacho de la agencia IP Paraguay.
La ministra de Salud, Esperanza Martínez, reconoció que en las zonas afectadas puede desarrollarse el cólera y otras enfermedades.
En este sentido, el gobierno paraguayo adquirió lanchas y baños móviles para asistir a la población.
Persiste además el peligro del ingreso de la enfermedad por los cursos de agua que de las zonas bajas de Bolivia. «No hemos tenido una transmisión endémica del cólera pero pensamos que el Chaco es un lugar potencial para que se pueda producir», resaltó la funcionaria.
Desde la Secretaría de Emergencia Nacional manifestaron la llegada al centro de operaciones situado en Irala Fernández, departamento de Presidente Hayes, de una delegación de Argentina, a fin de ayudar con los trabajos de rescate, y asistencia. De la delegación del vecino país, llegó una persona de la organización cascos blancos (agencia de asistencia humanitaria, dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Argentina), asimismo 2 pilotos que llegaron en un helicóptero de la gendarmería.
La Cámara de Senadores de Paraguay aprobó la declaración de emergencia que asigna más recursos para los operativos de asistencia a las miles de familias afectadas por las inundaciones.
El Ejecutivo por su parte, también adoptó una medida similar a fin de que todas las instituciones puedan apoyar las tareas que se vienen realizando desde hace un mes en la zona, cuando empezaron las primeras lluvias.