En Francia se acerca la hora del cierre de las mesas para la primera vuelta de las elecciones presidenciales y hasta el momento sólo se acercó a votar poco más del 70% de los 44,5 millones de ciudadanos llamados a las urnas, informó el Ministerio del Interior. La cifra es relativamente baja si se tiene en cuenta que en los últimos comicios presidenciales hace cinco años, el dato rondaba el 74%.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, que busca la reelección, acudió a votar en el distrito 16 de París acompañado por su mujer Carla Bruni-Sarkozy. Depositó su voto en el local electoral situado cerca de la casa de la pareja y no hizo declaraciones a los medios.
Las encuestas lo sitúan por detrás del candidato socialista y favorito, François Hollande, y también lo dan como perdedor en la segunda vuelta del 6 de mayo. De ser así, Sarkozy se convertiría en el primer presidente francés desde Valery Giscard d’Estaing, en 1981, que no gana un segundo mandato.
En declaraciones a la prensa Hollande consideró que se trata de un «momento importante» y se mostró «sobre todo respetuoso» con los deseos el pueblo francés. El ex líder del partido socialista es miembro del parlamento en representación de Correze y preside el consejo general regional. El candidato acudió a votar acompañado de su pareja Valerie Trierweiler.
Unas 800.000 personas de los territorios de ultramar franceses votaron ya el sábado, debido a la diferencia horaria con París. Diez candidatos aspiran a la presidencia, aunque no se espera que nadie se haga con más del 50% de los votos necesarios para salir elegido en la primera vuelta. Todo indica que será necesaria una segunda vuelta el próximo 6 de mayo, a la que concurrirán los dos candidatos más votados hoy.
En la primera vuelta las encuestas otorgan entre el 27,5% y el 30% del apoyo para Hollande, frente al 25-27% para Sarkozy, el 14-17% para la líder del ultraderechista Frente Nacional, Marine Le Pen, y el 12-14,5% para el candidato del Frente Izquierda Jean-Luc Melenchon.
El centrista y ex ministro de Educación, François Bayrou, fue el primero de los diez candidatos en votar. El político de 60 años, al que las encuestas otorgan alrededor del 10% de los apoyos, puede ser clave para decidir la segunda vuelta, aunque aún no ha revelado para quién pediría el apoyo de sus seguidores.
En torno al 25% de los votantes afirmaron que quizá no votarán tras una deslucida campaña en la que los candidatos fueron criticados por no logar tematizar lo suficiente la crisis del mercado laboral y el creciente poder de los mercados financieros.
