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Concejo: hubo acuerdo y el PDP ocupa el sillón vacante

Por Pablo Moscatello.- Por unanimidad los ediles aprobaron otorgarle a Roberto Bruera la banca que dejó libre Clara García.

El Concejo Municipal cambió a uno de sus integrantes. El cuerpo de ediles en pleno le aceptó en la sesión de ayer la renuncia a la edila socialista Clara García para que pueda asumir al frente de la recientemente creada Agencia de Seguridad Vial. Y tras ese formalismo, también luego de ser votado por unanimidad, se le otorgó esa banca a Roberto Bruera, del Partido Demócrata Progresista (PDP), quien era el primer reemplazante en la lista de suplentes de 2009 que encabezó la propia García.

La sesión de ayer culminó más tarde que lo habitual. Es que la jura de Bruera tuvo que sortear los formalismos. En primer término, el cuerpo en pleno le aceptó, como era de esperar, la renuncia a Clara García. Tras eso se conformó para la ocasión una comisión de Poderes integrada por cinco concejales quienes, en un cuarto intermedio, trataron el expediente en el que el flamante edil del PDP había solicitado la banca.

El pedido de Buera de ocupar el lugar vacante ya había sido avalado anteayer por el Tribunal Electoral de la provincia. Ese organismo se había pronunciado formalmente señalando que el ahora edil del PDP fue el primer suplente en la lista a concejales del Frente Progresista encabezada por García en 2009 y que, por ende, le correspondía reemplazarla.

En tanto, como no hubo otro postulante para ese escaño, la comisión de Poderes del Concejo sólo tuvo que “corroborar” que no hubiera objeciones. Con ese dictamen la sesión se retomó y terminó de aprobar el ingreso Bruera al Palacio Vasallo.

Ese hecho se produjo luego de que en los días previos se entablaran algunas polémicas en torno de quién debería haberse sentado en el sillón de García. La vicepresidenta del cuerpo, Norma López, del Frente Para la Victoria, había planteado la necesidad de que fuese una dama la que ocupara ese espacio para mantener así el cupo femenino, propiciando de esta manera el ingreso de la socialista María Inés Jasienovicz.

López (que finalmente, como todos los ediles, le dio su voto positivo al ingreso de Bruera) había sostenido que si quien deja vacante el cargo legislativo es mujer, lo más atinado es que su reemplazo sea otra dama. Bajo ese argumento, le había pedido “un gesto” coincidente al Partido Socialista. La edila justificó su petición en el hecho de que la propia intendenta Mónica Fein proclamó en varias oportunidades que en su propio gabinete aspira a tener el 50 por ciento de sus integrantes mujeres, y que el senador nacional socialista por Santa Fe, Rubén Giustiniani, también presentó un proyecto que proclama el respeto del cupo femenino en las vacancias de cargos ocupados por mujeres.

El presidente del Concejo, el oficialista Miguel Zamarini, le explicó a El Ciudadano la diferencia con lo sucedido en diciembre, cuando había dos demandas para ocupar la banca que dejaba una candidata del PRO, Sofía Alarcón, quien renunció a su escaño antes de asumir y desató un papelón en el partido que encabeza Mauricio Macri en el plano nacional. Por aquel entonces, el Concejo decidió hacer prevalecer la ley de cupo femenino, a pesar de que esa normativa no expresa explícitamente que una mujer debe ser reemplazada obligatoriamente por otra mujer. Para entender la cuestión vale aclarar que el Tribunal Electoral provincial sólo expide los certificados de cada autoridad, y es luego el Concejo el que evalúa los títulos y decide a quién le corresponde.

“Ahí (por lo sucedido en diciembre) sí hubo consideraciones para hacer y discutir. Eso, porque había dos personas que reclamaban la banca. Acá en cambio fue todo más fácil porque era una sola”, esgrimió Zamarini.

En tanto, desde el socialismo explicaron que la idea de no reclamar esa banca para Jasienovicz estuvo vinculada con el hecho de no crear debates ni conflictos al interior del Frente Progresista, del cual, entre otros, forma parte el PDP. El único edil que hasta ahora tenía ese partido en el Concejo es Aldo Poy, quien asumió en diciembre y disciplinadamente acompañó siempre todas las iniciativas del Ejecutivo, actuando así en línea con los legisladores oficialistas. Con la llegada de Bruera al Palacio Vasallo, el Partido Demócrata Progresista vuelve a tener, tras 15 años, dos ediles en el Concejo Municipal.

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