El árbitro del encuentro que el próximo sábado podrá determinar el retorno de River Plate a primera división cuando reciba a Almirante Brown, Alejandro Toia, aseguró hoy que éste será «el partido más importante» de su carrera.
«El partido entre River y Almirante Brown será el partido más importante que me tocó arbitrar en toda mi carrera, que finalizará a fin de este año», confesó Toia en una entrevista con el programa radial Deportivo Télam.
«Lo que pasa es que siempre existe el morbo de ver a River en la B Nacional, pero si asciende será un hecho histórico. Lo que espero es que el diablo no meta la cola y me coma una jugada clave para el resultado del partido», pidió.
El también titular de la Asociación Argentina de Arbitros calificó a este encuentro de «especial, trascendente, dentro de un fin de semana en el que habrá 13 partidos, entre la A y la B Nacional, que tendrán que jugarse simultáneamente».
«Lo que pasa es que en estas instancias hablan los que saben y los que no. Y lo que dice la prensa es lo que la gente repite», avisó.
«Por eso yo no tengo problemas en hablar con el periodismo, pero mientras sea de lo mío, ya que si me preguntan de táctica no entiendo nada», reconoció.
La referencia tuvo que ver con el hecho de que Toia «no» cree «que el éxito sea todo. Para mí el que gana no siempre es el mejor, aunque acá eso es lo que se pregona. Lo bueno es disfrutar de lo que se hace».
«Lo que nos ocurre a los árbitros es que hoy dirigimos bien y ya tenemos que estar pendientes de no cometer un error en la próxima fecha porque nos caen encima y nos consideran los peores», alertó.
«Por eso el fútbol argentino es el más difícil de la Tierra y los árbitros hacemos un gran esfuerzo al dirigirlo. Pero estoy orgulloso de lo que hacen mis colegas», enfatizó.
En ese aspecto consideró que será «imposible reemplazar a Héctor Baldassi. Es el mejor que vi técnicamente, inclusive por encima de Horacio Elizondo. El le ganó a la televisión».
«Después, hay una camada interesante que viene atrás, con Mauro Vigliano, Fernando Rapallini, Héctor Paletta y unos cuantos más, que van a andar bien. Pero el que evolucionó con mayor rapidez fue Germán Delfino», resaltó.
«Lo que sucede es que arbitrar no es fácil. Lo más sencillo es quedarte en tu casa y ver los partidos por televisión. Ahí todos saben y deciden que decisión tomar en cada jugada. Es que el rol del juez tomó demasiada importancia en los últimos años. Cuando yo era joven nadie conocía quien era el que dirigía un encuentro», apreció.
A los 47 años Toia se considera sin embargo «un agradecido» a todo lo que le dio su carrera. «Es obvio que en este oficio no se puede quedar bien con todo el mundo, pero yo me siento un privilegiado de dirigir a River en esta instancia como alguna vez cuando me tocó arbitrar el clásico Belgrano-Talleres, en el antiguo estadio cordobés de Chateau Carreras».
